"Querida María..."

"Querida Marla, con gran preocupación tengo que comunicarte que renuncio a mi exposición en el Reina Sofía. Yo aborrezco las actitudes arrogantes y crispadas, y siempre he preferido el silencio ante las posibles injusticias que a todos nos van llegando, porque no creo en esos pequeños pleitos; pero hay un límite a partir del cual el silencio es una indignidad y una cobardía.No voy a juzgar lo injusto o acertado de eliminar de la colección permanente que has montado a todos los que trabajamos desde el lenguaje del realismo, eso ya se verá. Para mí es triste, pero no le doy más importancia que l...

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"Querida Marla, con gran preocupación tengo que comunicarte que renuncio a mi exposición en el Reina Sofía. Yo aborrezco las actitudes arrogantes y crispadas, y siempre he preferido el silencio ante las posibles injusticias que a todos nos van llegando, porque no creo en esos pequeños pleitos; pero hay un límite a partir del cual el silencio es una indignidad y una cobardía.No voy a juzgar lo injusto o acertado de eliminar de la colección permanente que has montado a todos los que trabajamos desde el lenguaje del realismo, eso ya se verá. Para mí es triste, pero no le doy más importancia que la que tiene estar o no representado en una colección por muy importante que sea. Pero aparecer por allí en estas circunstancias con el trabajo de toda mi vida es algo que no puedo aceptar, no puedo soportarlo.

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Esta exposición mía la heredaste de Tomás Llorens, que fue quien me la pidió; yo te doy las gracias por respetar el compromiso, pero te descargo de esta obligación.

Un saludo afectuoso. , 11 septiembre 92".

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