Fallece en París la actriz Arletty, musa del realismo - poético francés
Fue la preferida del director Marcel Carné en los años treinta y cuarenta.
La actriz francesa Arletty, falleció el pasado jueves, a los 94 años de edad, en su domicilio de París. Era una gran actriz de teatro y cine, cuyo nombre artístico, ideado por Tristan Bernard, ocultaba a Léonie Bathiat.
En los años treinta, gracias a Hótel du nord y Le jour se lève, y cuarenta, protagonizando Les visiteurs du soir y Les enfants de paradis los cuatro filmes realizados por Marcel Carne Arletty, se convierte en la más conocida de las actrices francesas.Con La douceur d'aimer, de Marcel Carné, inaugura el llamado realismo poético, y Arlett...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
La actriz francesa Arletty, falleció el pasado jueves, a los 94 años de edad, en su domicilio de París. Era una gran actriz de teatro y cine, cuyo nombre artístico, ideado por Tristan Bernard, ocultaba a Léonie Bathiat.
En los años treinta, gracias a Hótel du nord y Le jour se lève, y cuarenta, protagonizando Les visiteurs du soir y Les enfants de paradis los cuatro filmes realizados por Marcel Carne Arletty, se convierte en la más conocida de las actrices francesas.Con La douceur d'aimer, de Marcel Carné, inaugura el llamado realismo poético, y Arletty, como mademoiselle Raymonde, una prostituta que se indigna cuando su chulo habla de que desea "cambiar de atmósfera", logra una síntesis perfecta de espíritu canalla y elegancia.
La asociación Raymonde-Arletty ha pervivido hasta el punto que, ya en la década de los setenta, cuando la actriz ya estaba retirada, al estallar un conflicto entre las prostitutas y la policía, Arletty se solidarizó con ellas y acudió a un encierro en una iglesia: "Fui a misa con ellas. ¡Eran mujeres con auténtica categoría! Todas se preocuparon por mí y me trataron con gran deferencia. No me extrañó, porque me recibieron como si fuese su decana".
Pero el gran papel de Arletty en el cine es su Garance en Les enfants du paradis (1943-44), una cinta que muchos consideran como la más importante de todo el cine francés. Tras la II Guerra Mundial, fue juzgada por colaboracionista. Había sido amante de un alto oficial alemán. "Soy una mujer", dijo al juez. La condenaron a un discreto ostracismo profesional.
En 1962, pierde la vista. Pero tiene un contrato para una comedia -Voyage a Biarritz- con Fernandel. La rodará en la oscuridad, guiándose por la voz de sus compañeros.