Ricardo Bofill propone que la Expo se amplíe a un año

El arquitecto catalán Ricardo Bofill, quien estuvo a punto de ser nombrado comisario general de la Expo en 1984, aconsejó ayer que se prolongue a un año la duración de la muestra universal. "Dado el éxito obtenido, no veo por qué la muestra. tiene que durar tan sólo seis meses. Yo la prolongaría a un año e intentaría conservar el máximo de edificios posibles, incluso algunos que iban a ser efímeros", dijo ayer durante su primera visita a La Cartuja.

Bofill aconsejó a los organizadores que realizasen en, la isla todas las transformaciones necesarias para sus posteriores usos antes de...

El arquitecto catalán Ricardo Bofill, quien estuvo a punto de ser nombrado comisario general de la Expo en 1984, aconsejó ayer que se prolongue a un año la duración de la muestra universal. "Dado el éxito obtenido, no veo por qué la muestra. tiene que durar tan sólo seis meses. Yo la prolongaría a un año e intentaría conservar el máximo de edificios posibles, incluso algunos que iban a ser efímeros", dijo ayer durante su primera visita a La Cartuja.

Bofill aconsejó a los organizadores que realizasen en, la isla todas las transformaciones necesarias para sus posteriores usos antes de que acabe la muestra. "Algunas personas deberían vivir en la isla o esto se convertirá en una ciudad muerta".

El arquitecto aseguró no estar resentido con Sevilla por las protestas que originó en la ciudad la propuesta de su nombre para el cargo. "Si me hubiesen elegido comisario habría sido un sacrificio para mí, ya que habría tenido que abandonar muchos de mis trabajos", señaló el arquitecto, que acaba de asistir en Chicago a la inauguración de su último proyecto, un rascacielos.

Bofill, después de: pasar la mañana en la Expo, declaró que la muestra ha superado todas las expectativas y añadió que "el país ha demostrado su capacidad de improvisación", sin. aclarar si se trataba de una alabanza o una crítica.

Sin grandes figuras

En opinión del arquitecto, el recinto tiene las dimensiones correctas, ya que permite la circulación fluida a pesar del gran número de visitantes; urbanísticamente "podía estar mejor" y en cuanto a la arquitectura "hay de todo". Según Bofill, los proyectos de la Expo no están firmados por grandes figuras internacionales, salvo el pabellón de Japón, obra de Tadao Ando, a quien el arquitecto catalán calificó como "uno de los ocho mejores arquitectos del mundo".

El de Francia, con, su arquitectura conceptual; el de Gran Bretaña y el de Espa:Sa son, en opinión de Bofill, algunos de los más interesantes de la muestra. Mientras que el italiano, diseñado por Gac Aulenti y Pierlulgi Spadolini, "no tiene la entidad ni la fuerza que debería".

Ricardo Bofill no firma ninguno de los grandes proyectos realizados en Sevilla para 1992 y su relación con la conmemoración del descubrimiento se ciñe al edificio que representa a España en la Expo que se celebra este año en Génova (Italia) y que, según el arquitecto, "se improvisó en el último momento".