FERIA DE SAN ISIDRO

Javier Vázquez dice que está demasiado visto en Madrid

Javier Vázquez compartía la decepción con sus compañeros de terna por no haber obtenido el éxito que pretendían, y que él achacaba a que ya ha toreado muchas veces como novillero en la plaza de Las Ventas y no se le valora, cosa que entiende. "Estoy demasiado visto aquí" confesaba, "por lo que la gente se cansa y se muestra fría, es algo lógico que, seguramente, me ocurriría a mí también si fuese el espectador".

Al margen de ello, Vázquez se encontraba satisfecho de su actuación: "Le he echado variedad y riesgo con capote, muleta y banderillas. La lástima es que se me fuera la mano ...

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Javier Vázquez compartía la decepción con sus compañeros de terna por no haber obtenido el éxito que pretendían, y que él achacaba a que ya ha toreado muchas veces como novillero en la plaza de Las Ventas y no se le valora, cosa que entiende. "Estoy demasiado visto aquí" confesaba, "por lo que la gente se cansa y se muestra fría, es algo lógico que, seguramente, me ocurriría a mí también si fuese el espectador".

Al margen de ello, Vázquez se encontraba satisfecho de su actuación: "Le he echado variedad y riesgo con capote, muleta y banderillas. La lástima es que se me fuera la mano al matar al primero, cuando creo que pese a la frialdad del público podía haber cortado oreja, lo que después del espadazo que le atizé era imposible". El madrileño añadía que su apoderado, Juan Gutiérrez Puerta, le voceó en su segundo enemigo para que le echase más garra: "Era muy difícil, porque el novillo ya iba a menos".

Vázquez, que traía preparado el quite de la mariposa, como homenaje a su creador, Marcial Lalanda, no pudo realizarlo porque no vio que se prestase ninguno de los novillos de su lote. Sus últimas palabras eran para asegurar que ya no va a volver a Las Ventas como novillero, pues piensa tomar la alternativa este año, aunque no sabe donde: "A ver si de matador de toros me hacen más caso".

Manolo Sánchez también encontró frío al público, "sobre todo al principio de mi faena a mi primer novillo, muy incómodo y que metía la cara con violencia y pegando tornillazos, por lo que había que estar muy paciente con él hasta que se tragó varias series de naturales, que no refrendé con la espada".

Palmas de tango

Con el otro, al que calificaba de burra con cuernos, reconocía no haber pasado de discreto y comprendía que sonaran palmas de tango: "La gente viene con ilusión y cuando ve que es imposible ver algo interesante algunos se enfadan".La decepción de Luis Delgado era por el mal juego de su lote, "porque el público estuvo cariñosísimo conmigo y yo le correspondí jugándome la vida con el regalito de sobrero que me tocó". Admitía que se equivocó al brindar el sexto, con el que confiaba lucirse: "Los animales cambian mucho y me ha servido de lección, porque aún estoy un poco verde y tengo que aprender a base de errores".

Comentaba que su mayor satisfacción fueron los dos estoconazos con que tumbó a sus enemigos: "No habré realizado la suerte con clasicismo, pero sí con la máxima decisión, porque con mi estatura no me queda más remedio que volcarme en el morrillo, y que sea lo que Dios quiera".

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