Cartas al director

El Consulado de Túnez

En relación a la carta aparecida en el diario de su digna dirección el pasado 8 de enero, mucho le agradecería publicara las siguientes puntualizaciones relativas a la misma:El día 9 de julio de 1991, Carmen Trigueros Montero y Begoña Milo Martínez se presentaron en el Consulado de España en Túnez manifestando haber sido víctimas de un hurto de 10.000 dólares en la habitación del hotel donde se hospedaban.

La cónsul, ante la denuncia de las dos ciudadanas españolas, acudió personalmente a la dirección del hotel y a la comisaría de policía del distrito para asegurarse la máxima diligenci...

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En relación a la carta aparecida en el diario de su digna dirección el pasado 8 de enero, mucho le agradecería publicara las siguientes puntualizaciones relativas a la misma:El día 9 de julio de 1991, Carmen Trigueros Montero y Begoña Milo Martínez se presentaron en el Consulado de España en Túnez manifestando haber sido víctimas de un hurto de 10.000 dólares en la habitación del hotel donde se hospedaban.

La cónsul, ante la denuncia de las dos ciudadanas españolas, acudió personalmente a la dirección del hotel y a la comisaría de policía del distrito para asegurarse la máxima diligencia en el esclarecimiento de los hechos.

Tanto la policía como los responsables del hotel, aun a pesar de la extrañeza de que la cantidad anteriormente mencionada no hubiera sido depositada en la caja fuerte del hotel y ante la insistencia de la cónsul, llevaron a cabo las gestiones pertinentes para tratar de descubrir al culpable, procediéndose por parte de la policía al registro de las habitaciones del hotel y al interrogatorio de los clientes.

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Asimismo, la sección consular otorgó la ayuda económica individual extraordinaria prevista para estos casos , a cargo del presupuesto del Estado, y también consiguió la cónsul la reserva de dos plazas en un vuelo de vuelta a España. Tarea nada fácil teniendo en cuenta la fecha en que se debía realizar el viaje.

Quisiéramos también señalar que los consulados de España en el extranjero no disponen de camareros en su plantilla orgánica, tratándose el camarero mencionado por la señora Triguero de un oficial de cancillería que, ante la imposibilidad de que la cónsul abandonara su puesto y desatendiera así otras obligaciones, amablemente acompañó a las ciudadanas españoles en sus gestiones en Túnez.

La mencionada funcionaria prestó sus servicios en calidad de cónsul en Túnez desde julio de 1988 a julio de 1991; durante dicho periodo fueron numerosísimas sus gestiones de todo tipo dirigidas a auxiliar a los españoles en Túnez, como lo acreditan las cartas de agradecimiento recibidas y la consideración especial que su gestión ha merecido en este Ministerio.- Oficina de Información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores

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