CONVULISÓN EN LAS RUINAS DE LA U.R.S.S.

La CEI, incapaz de resolver la crisis ruso-ucrania

ENVIADA ESPECIAL Los ministros de Asuntos Exteriores de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) intentaron ayer disminuir la tensión entre las 11 repúblicas, y muy especialmente entre Ucrania y Rusia, y dar la impresión de que la Comunidad surgida de las ruinas de la URSS sigue adelante, pese a las dificultades tanto económicas como político-militares por las que atraviesa. No parece, sin embargo, que Andrei Kozyrev, ministro ruso, y su colega ucranio, Anatoly Zlenko, hayan sido capaces de llegar a un acuerdo sobre la repartición de las Fuerzas Armadas, que, sin duda, deberá ser tratada e...

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ENVIADA ESPECIAL Los ministros de Asuntos Exteriores de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) intentaron ayer disminuir la tensión entre las 11 repúblicas, y muy especialmente entre Ucrania y Rusia, y dar la impresión de que la Comunidad surgida de las ruinas de la URSS sigue adelante, pese a las dificultades tanto económicas como político-militares por las que atraviesa. No parece, sin embargo, que Andrei Kozyrev, ministro ruso, y su colega ucranio, Anatoly Zlenko, hayan sido capaces de llegar a un acuerdo sobre la repartición de las Fuerzas Armadas, que, sin duda, deberá ser tratada en la próxima cumbre de jefes de Estado. La reunión, que tiene lugar en Moscú, podría prolongarse hasta hoy.

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Rusia prosigue mientras tanto marcando la pauta, al menos en temas económicos, sin aparentemente consultar a los otros socios. El presidente del Banco Central ruso, Georgy Matyukhin, anunció ayer que Moscú solicitará el aplazamiento del pago de los intereses de la deuda exterior soviética. Los países y entidades privadas deudores ya habían aceptado el aplazamiento del pago del principal, pero Matyukhin asegura que, por el momento, tampoco pueden hacer frente a los intereses.Al mismo tiempo, adelantó que Rusia -que sigue controlando en exclusiva la masa de rublos en circulación en todo el territorio de la ex URSS, así como su valor- establecerá un nuevo cambio cara a las inversiones extranjeras, que se situará entre 8 y 10 dólares por rublo (en el mercado normal se ofrecen 110 rublos por un sólo billete norteamericano). Matyukhin explicó que, dado que se va a proceder rápidamente a la privatización y venta de miles de empresas, "no se trata de venderlas por nada".

Acuerdos sobre la deuda

Rusia culpa a las otras repúblicas de la imposibilidad de cumplimentar los acuerdos internacionales sobre la deuda. Según aceptaron todos los firmantes de la CEI, Moscú se haría cargo del 61% del valor total, pero el otro 39% se repartiría proporcionalmente entre los demás socios. "Somos muy rápidos a la hora de dividir las cosas -aseguró Matyukhin- pero a la hora de pagar, nadie se acuerda. Tenemos que enseñar a nuestros socios a cumplir sus obligaciones internacionales. Espero que los acreedores comprenderán nuestra situación, porque si no habría que declarar el Banco Central en quiebra".

Los temas económicos no constituyen, sin embargo, el núcleo central de la disputa entre las repúblicas. Algunas de ellas, como Ucrania, intentan sortear la escasez de rublos que les envía Moscú con el lanzamiento de una especie de cupones, con valor de cambio para productos de primera necesidad.

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La reunión de ministros de Exteriores, finalmente, se enzarzó en una discusión más acorde con sus responsabilidades diplomáticas: ¿A quién pertenecen ahora los edificios ubicados en el extranjero y propiedad de la antigua Unión Soviética? Diez repúblicas están indignadas con la número once: la Federación Rusa que no tardó ni 48 horas en apropiarse de todas las embajadas, consulados y similares, sustituyendo la bandera roja por la tricolor que ondea ahora en el Kremlin.

Rusia es la única república que no se ha declarado independiente, precisamente para convertirse en la heredera legal de la URSS. Según Kozyrev, el tema puede discutirse "con calma" y los demás miembros de la Comunidad no tienen motivos para ponerse nerviosos porque "la Federación Rusa representará sus intereses en el extranjero".

Los otros ministros de Exteriores creen más justo proceder a un reparto proporcional. Muchas de las nuevas repúblicas han sido ya reconocidas y varios países, entre ellos España, han anunciado la apertura de embajadas en sus capitales. Lógicamente, quieren corresponder con el menor coste posible.

Propiedad de las tiendas

El ciudadano normal sigue de lejos la disputa, mucho más interesado, por ejemplo, por la propiedad de las tiendas. El alcalde de Moscú, Gavril Popov, aseguró ayer que antes de este fin de semana se habrán privatizado 71 en la capital. Actualmente, sólo están en manos privadas cuatro tiendas, en una ciudad de casi nueve millones de habitantes. Los servicios de prensa de la alcaldía afirman que ya se han recibido 10.000 solicitudes de compra. Los famosos almacenes Gum, situados en plena plaza Roja e instalados en un extraordinario edificio, serán subastados, igual que otras 400 tiendas de grandes dimensiones.

Sea de quien sea la propiedad, el precio de los alimentos y de los productos de primera necesidad seguirá por las nubes. El presidente ruso, Borís Yeltsin, prometió el jueves, ante los trabajadores de una fábrica de aviones, que todo empezará a ir mejor dentro de seis u ocho meses y que para fines de este año se podrá considerar que la economía se ha estabilizado, "al menos parcialmente". "Tienen que tener un poco más de paciencia y confiar en el Gobierno", pidió Yeltsin.

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