44º FESTIVAL DE CANNES

Moretti desvela supervivencias del fascismo en la democracia

Gianni Moretti y su discípulo Daniel Luchetti son los creadores de Il portaborse, una pesimista y no obstante muy divertida película, que es heeredera directa de la gran tradición de la comedia italiana de los años cincuenta y sesenta. La comedia italiana, y tras ella todo el cine de Italia, después de casi dos décadas de desorientación, comienza a recobrar su identidad perdida.

El joven Gianni Moretti ha sido en los últimos años el revulsivo que necesitaba el cine italiano para salir de su progresivo adocenamiento. Que Ettore Scola, Marco Ferreri y Federico Fellini, entre otros clásico...

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Gianni Moretti y su discípulo Daniel Luchetti son los creadores de Il portaborse, una pesimista y no obstante muy divertida película, que es heeredera directa de la gran tradición de la comedia italiana de los años cincuenta y sesenta. La comedia italiana, y tras ella todo el cine de Italia, después de casi dos décadas de desorientación, comienza a recobrar su identidad perdida.

El joven Gianni Moretti ha sido en los últimos años el revulsivo que necesitaba el cine italiano para salir de su progresivo adocenamiento. Que Ettore Scola, Marco Ferreri y Federico Fellini, entre otros clásicos vivientes, sigan en activo no bastaba, pues sus nombres y sus talentos son ya historia y se cierran sobre sí mismos. Hacía falta un relevo y éste comienza ahora a producirse alrededor del incatalogable y desconcertante actor, director, productor y guionista Glanni Moretti, un agitador de pura cepa, con una temible capacidad para no dejar títere con cabeza en la vida política de su país y, de rechazo, en otros, como el nuestro, aunque a España no ha llegado todavía ninguna película suya.Cineasta de izquierda, libre, independiente y muy radical, Moretti vapuleó sin contemplaciones a la Democracia Cristiana en La misa ha terminado, lo que no le impidió poco después dar otro vapuleo aún más fuerte al Partido Comunista Italiano en Palombella rossa. Ahora, en Il portaborse (término que no tiene equivalente exacto en castellano y que designa al individuo que lleva la cartera a un ministro, le escribe discursos y, le sirve de chivato, de consejero, de fontanero, de asesor cultural y de barrendero en los trabajos sucios), le ha tocado el turno al Partido Socialista Italiano, y, sin nombrarlo, el vapuleo es aún más contundente, pues si en las dos películas anteriores Moretti utilizó metáforas, en ésta va al grano directamente.

Alusiones

El PSI no se ha dado por enterado, y funcionarios suyos que han visto la película han declarado que, además de muy mala, no va contra ellos o se refiere a otros. Pero infinidad de italianos de a pie parece que no piensan de la misma manera, y en las sólo dos semanas que la película lleva exhibiéndose en ltalia su llamada al sentido del escándalo se ha extendido como un reguero de pólvora. La idea del filme es que en el interior del PSI funcionan hombres y mecanismos de poder cuya metodología política abarca desde la corrupción a la delación, desde la calumnia a la violencia, desde la deserción de la moral a la ideología del poder por el poder, que: es la fuente de todo fascismo.

Una divertida, libre y finalmente amarga comedia. Está dirigida por Luchetti con la solvencia, facilidad y transparencia heredada de los viejos maestros italianos. Y está interpretada por Moretti y Silvio Orlando con una finura y una capacidad de convicción más que notables. Provocó Il poriaborse la primera ovación unánime que se ha oído en este festival.

Comenta Moretti: "Mi personaje no es alguien concreto, ni de ahora. Odio a la actualidad tanto como odio a esos filmes de autores que creen que el mundo gira alrededor de su ombligo. Il portaborse es pesimista, pero en definitiva hay que seguir luchando por las causas justas, aunque estén perdidas de antemano".

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