Iberia negocia la implantación en Miami de una plataforma para su expansión en Latinoamérica

Una delegación española y otra norteamericana inician hoy en Washington una negociación cuyo propósito es, para los primeros, convertir a Miami en un hub (centro de actividad) para la penetración de la compañía Iberia en Latinoamérica, mientras los segundos esperan reforzar la presencia en España de su primera línea aérea, American Airlines (AA), e introducir además a otros, dos colosos de la aviación comercial estadounidense que volarían a la Península desde Washington y Atlanta.

Carlos Blasco, director general de Relaciones Económicas Internacionales, encabeza la delegación española, ...

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Una delegación española y otra norteamericana inician hoy en Washington una negociación cuyo propósito es, para los primeros, convertir a Miami en un hub (centro de actividad) para la penetración de la compañía Iberia en Latinoamérica, mientras los segundos esperan reforzar la presencia en España de su primera línea aérea, American Airlines (AA), e introducir además a otros, dos colosos de la aviación comercial estadounidense que volarían a la Península desde Washington y Atlanta.

Carlos Blasco, director general de Relaciones Económicas Internacionales, encabeza la delegación española, que integran representantes de Aviación Civil y de Iberia, y su interlocutor en Washington será otro diplomático, Paul Wisgerhof, director de la Oficina de Negociaciones Aéreas del Departamento de Estado.Ambas delegaciones mantuvieron en febrero en Madrid una primera ronda de conversaciones que los norteamericanos rompieron por considerar excesivas las pretensiones de Iberia en Miamí. Pero ahora se da por seguro que concluirán, porque entonces se produjo una gran aproximación de los puntos de vista y, además, compañías norteamericanas como AA han empezado ya a anunciar en prensa sus nuevos destinos en EE UU a partir de España e incluso a vender billetes.

La compañía de bandera española pretende disponer en ese aeropuerto de Florida de una flota de cuatro aviones autorizados a volar a toda Latinoamérica y al Caribe, excepto a Brasil, Uruguay y Argentina. A bordo subirían sobre todo pasajeros en tránsito procedentes del vuelo de Iberia de Madrid, aunque también podrían embarcarse viajeros procedentes de otros lugares o del mismo Miami. El motivo de la ruptura fue, hace dos meses, la negativa de Wisgerhof a que Iberia contara permanentemente, en el aeropuerto del mundo donde más tráfico se genera hacia América Latina, con más de dos aviones, independientemente de su tamaño.La tranformación de Miami en una plataforma para la penetración de Iberia en Latinoamérica se enmarca en su estrategia tendente a convertir a. Latinoamérica en su punto fuerte para hacer frente a la creciente liberalización del transporte aéreo en Europa.

¿Segundo objetivo chileno?

Con ese propósito, la empresa del Instituto Nacional de Industria ha tomado participaciones en Aerolíneas Argentinas -la operación quedó cerrada en la noche del viernes al sábado-, lo hará en breve (Ícon un 35%) en Ladeco y, con su socio dentro de esta línea area chilena especializada en vuelos internos, aca. ricia la idea de adueñarse de LAN Chille, una de las compañías suramericanas que ofrece mejor servicio.En la negociación de febrero, la delegación norteamericana aceptó, sin embargo, aumentar de 7 a 10 las ciudade.s en las que Iberia tiene derecho a aterrizar, aunque no vuele a un tercío de esos destinos por carecer, por ahora, de la suficiente flota de largo recorrido. Se le otorgaron además derechos de tráfico entre Toronto (Canadá) y Chicago y Los Ángeles, y se le hicieron tambien algunas otras concesiones menores en matería de código compartido con companías estadounidenses.Excepto el visto bueno para que una tercera línea nortea mericana, Continental, enlace Nueva York con Madrid, la de legación de Wisgerhof obtuvo entonces de sus interlocutores todo lo que pedía, incluida la autorización para que AA opere entre Miami y Madrid; United Airlines, la segunda companía estadounidense, lo haga entre Washington y Madrid, y Delta, el tercer coloso aéreo, vuele a Madrid o Barcelona desde Atlanta, donde se celebrarán las Olimpíadas de 1996.

Al igual que Iberia en Míami, una compañía norteamericana podrá disponer también de aviones menores en Madrid para transportar pasajeros a Europa, probablemente a destinos del Mediterráneo occiclental europeo corno Roma o Atenas.

Con este acuerdo se acrecentará el predominio norteamerícano en el tráfico aéreo sobre el Atlántico norte entre España y EE UU. Iberia, que hasta mediados de los años ochenta transportaba al 60% de los viajeros, ha ido paulatinamente perdiendo cuota de mercado. De los 910.193 pasajeros que volaron entre noviembre de 1989 y octubre de 1990 entre España y EE UU, ya sólo un 49% lo hicieron a bordo de sus aviones.

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