Chapuzas

Sobre zonas subterráneas que servían de acceso a los pasadizos de tuberías, pasos de agua, llaves, etcétera, de lo que hace años fue la central térmica que suministraba la calefacción al Parque de las Avenidas, se pretende nada menos que levantar un edificio que deja sin luces a un garaje de 142 plazas y a los bajos de las viviendas circundantes, bajo una licencia de obras que dice: "Reconstrucción de la finca", faltando evidentemente a la verdad, ya que no hay nada que reconstruir, puesto que nunca existió edificio construido.Aparte de la aberración urbanística que sería con el entorno de los...

Sobre zonas subterráneas que servían de acceso a los pasadizos de tuberías, pasos de agua, llaves, etcétera, de lo que hace años fue la central térmica que suministraba la calefacción al Parque de las Avenidas, se pretende nada menos que levantar un edificio que deja sin luces a un garaje de 142 plazas y a los bajos de las viviendas circundantes, bajo una licencia de obras que dice: "Reconstrucción de la finca", faltando evidentemente a la verdad, ya que no hay nada que reconstruir, puesto que nunca existió edificio construido.Aparte de la aberración urbanística que sería con el entorno de los demás edificios, concretamente en la avenida de Brasilia, 25, lo más demencial es que pretenden convertir esa zona en industrial, dedicada a pescado (¿?), con cintas elevadoras, carga y descarga de camiones, oficina para proveedores y clientes, con los consiguientes olores y ruidos, y, por supuesto, creando nuevos atascos de muy difícil solución en una zona ya de por sí congestionada y contaminada.

¿Qué interés tiene el Ayuntamiento en permitir semejante bodrio? Si la licencia de obras fue concedida en febrero de 1990, ¿por qué no han contestado ni a una sola de los cientos de instanelas enviadas por los vecinos? ¿Qué se pretende ocultar detrás de todo esto?

Bueno sería colocar en sitio bien visible una gran placa, para que quede constancia, con los nombres del alcalde, del concejal del distrito, técnicos y partido político que consintió semejante chapucería. Así debiera hacerse, por ejemplo, en la Torre de Valencia y en tantos otros sitios que consintieron nuestras autoridades, y con todas las bendiciones.

Naturalmente, las comunidades perjudicadas entablarán todas las acciones legales que les correspondan en defensa de sus derechos.-