La CE investiga si los avales de la Generalitat valenciana fomentan la competencia desleal
La CE ha solicitado a la Generalitat información sobre los avales concedidos desde 1986 a empresas valencianas. El interés de los organismos comunitarios es determinar si este tipo de ayudas :son sancionables como competencia desleal. Desde 1988, el Consell garantizó créditos por valor de 2.030 millones de pesetas a cinco empresas valencianas. El presupuesto de la Generalitat previsto este año para la concesión de avales asciende a 10.000 millones de pesetas y la cuantía
de las peticiones ya ha sobrepasado esta cantidad, según fuentes de la Consejería de Economía y Hacienda. El Trib...
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La CE ha solicitado a la Generalitat información sobre los avales concedidos desde 1986 a empresas valencianas. El interés de los organismos comunitarios es determinar si este tipo de ayudas :son sancionables como competencia desleal. Desde 1988, el Consell garantizó créditos por valor de 2.030 millones de pesetas a cinco empresas valencianas. El presupuesto de la Generalitat previsto este año para la concesión de avales asciende a 10.000 millones de pesetas y la cuantía
de las peticiones ya ha sobrepasado esta cantidad, según fuentes de la Consejería de Economía y Hacienda. El Tribunal de Justicia de Luxemburgo y la Dirección General Cuarta de la Comisión Europea, organismo responsable de vigilar las normas de la CE sobre la libre competencia y las ayudas estatales, han solicitado información a la Generalitat sobre los avales concedidos desde la entrada de España en la CE, la mayoría de los cuales han sido para empresas o instituciones públicas.
El Consell aprobó en 1990 la concesión de cuatro avales, por valor de 1.000 millones de pesetas, a distintas sociedades de una firma juguetera, todavía pendientes de formalizar. El mismo año, una firma del textil consiguió un aval de 450 millones de pesetas y otra empresa de abastecimiento, con capital públicó, se benefició de una garantía de 130 millones. Además de estas garantías para la obtención de créditos, la Generalitat concedió en 1988 dos avales por 400 millones de pesetas a una papelera.