La música multirracial de Mano Negra

El grupo francés anuncia su gira por España y el lanzamiento de su próximo disco

Mientras da los últimos retoques a su último disco, Mano Negra prepara en París su próxima gira española, que comenzará el próximo 21 de febrero en Valencia para continuar después en Murcia, Barcelona, Madrid, Lacunza, Zaragoza y Mondragón. Grupo multirracial por el origen de sus miembros, los idiomas que utilizan en sus canciones y los diferentes estilos que mezclan en su música, Mano Negra reconoce que la base de su éxito es la amistad, la energía y la sencillez. "Para nosotros esto es música, no trabajo", dice Manu Chao, cantante del grupo.

Mano Negra fue elegido en 1989 como el mejo...

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Mientras da los últimos retoques a su último disco, Mano Negra prepara en París su próxima gira española, que comenzará el próximo 21 de febrero en Valencia para continuar después en Murcia, Barcelona, Madrid, Lacunza, Zaragoza y Mondragón. Grupo multirracial por el origen de sus miembros, los idiomas que utilizan en sus canciones y los diferentes estilos que mezclan en su música, Mano Negra reconoce que la base de su éxito es la amistad, la energía y la sencillez. "Para nosotros esto es música, no trabajo", dice Manu Chao, cantante del grupo.

Mano Negra fue elegido en 1989 como el mejor grupo francés, algo paradójico porque los músicos que lo forman tienen orígenes diversos. Ascendentes franceses, españoles y norteafricanos abundan en un grupo que canta en diferentes idiomas (castellano, francés, inglés y árabe) y realiza un tipo de música que recoge estilos diversos (rock, pop, flamenco, rap, aires latinos, salsa, funk ... ). Ahora, a punto de publicar su tercer elepé -"es posible que se llame Kíng of bongo, pero aún no está decidido", afirma Manu Chao, hijo de españoles y cantante y compositor del grupo-, Mano Negra prepara su segunda gira española. "Teníamos previsto actuar en España a finales del año pasado", dice Chao, "pero volvíamos de gira y Pierrot, nuestro trombonista, dejó el grupo. Estaba cansado de viajar, y decidimos guardar el sitio, por si algún día quiere volver. No queremos cambiar un amigo por un músico. Y aprovechamos esta ausencia para variar los recitales y descansar un poco"."La fuerza de nuestra música es la amistad", decía Manu Chao hace un año, y parece que está idea se mantiene en un grupo que se caracteriza por su fuerza escénica: "Tratamos de no engañar. Intentamos hacerlo todo de la manera más natural posible, sin trampas y sin mirar a la gente por encima del hombro. No tenemos respeto por los estilos ni tampoco creo que hagamos algo nuevo, aunque la manera de enfocar nuestra música es diférente".

Sencillez

Mano Negra ofrece una imagen de sencillez. El grupo se aloja en hoteles poco lujosos -en Madrid prefiere la zona de la Ballesta-, y sus recitales no apuestan por la tecnología ni la espectacularidad en cuando a medios. "Tengo la misma guitarra y el mismo amplificador desde hace muchos años. No queremos 10.000 cosas que haya que cambiar dentro de unos meses porque han aparecido otras mejores. Funcionamos de manera muy simple". A pesar de esta economía de medios, las actuaciones de Mano Negra se caracterizan por la entrega y la energía. "Nos damos cuenta que algún día podemos tener problemas para mantener esta energía. Lo más difícil es cuando estamos en París, con la presión de la gente. Durante las giras, el cansancio no pesa y nunca nos hemos arrepentido de un concierto. Esperamos con ansia las próximas actuaciones, porque pensamos que le hemos dedicado poco tiempo a España".Mano Negra comenzará su gira el día 21 de febrero en Valencia, para continuar en Murcia (día 22), Barcelona (día 23), Madrid (día 27), Lacunza (1 de marzo), Zaragoza (día 2) y Mondragón (día 3). "No será una presentación oficial del último disco", dice Manu Chao, "sino una mezcla de todo. Simplemente, vamos a tocar". Según Chao, en este último trabajo "hay de todo. Canciones duras, suaves, salsa, reggae... Hasta un rap en español".

Después, Mano Negra realizará una gira por Francia durante dos meses -"vamos a tocar en los suburbios de París, donde hay muchos problemas de violencia y marginación. La gente vive muy mal y queremos que los parisienses vayan al extrarradio y vean las dificultades que se pasan"-, antes de embarcarse en un proyecto que ilusiona a Manu Chao: "A principios de 1992, haremos una gira en un barco mercante. Saldremos de Lisboa y, desde Cádiz, navegaremos hasta América del Sur. Tocaremos en cada puerto".

Es la última locura de Mano Negra, un grupo que en estos días da los últimos retoques a su disco, ensaya sus recitales en España y está pendiente de Samuel, el hijo recién nacido de Daniel, guitarrista del grupo. Y que está dispuesto a olvidar los malos tragos de su reciente gira por Estados Unidos, como teloneros de Iggy Pop: "Hubo una relación mala entre los dos grupos, pero dimos nuestros mejores conciertos. Para ellos es trabajo, no música. Para nosotros, música, no trabajo".

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