FERIA DE OTOÑO

Un lujo de novillada

"¿Dónde está Finito?", preguntaban por el tendido algunos aficionados, al ver en el ruedo venteño aquellos novillos de lujo, hierro Martín-Peñato que, por su irreprochable presentación y su encastada nobleza, eran el pasmo y la admiración del público en general y taurinos sábelotodo -que en realidad saben bien poquito, y de toros, menos- pero no de la afición asidua, esa que no se pierde corrida y conoce de otros fastos la calidad de esta ganadería.Tanto revolver y exigir, los taurinos sabelotodo, a fin de que la figura haga su aparición en Las Ventas con garantías de que el ganado le sald...

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"¿Dónde está Finito?", preguntaban por el tendido algunos aficionados, al ver en el ruedo venteño aquellos novillos de lujo, hierro Martín-Peñato que, por su irreprochable presentación y su encastada nobleza, eran el pasmo y la admiración del público en general y taurinos sábelotodo -que en realidad saben bien poquito, y de toros, menos- pero no de la afición asidua, esa que no se pierde corrida y conoce de otros fastos la calidad de esta ganadería.Tanto revolver y exigir, los taurinos sabelotodo, a fin de que la figura haga su aparición en Las Ventas con garantías de que el ganado le saldrá propicio, y resulta que, además de no salirle propicio, 24 horas más tarde saltan a la misma arena, destinados a unos novilleritos sin exigencia alguna, cinco ejemplares de lujo que les brindan el triunfo cuerno en mano y, por si fuera poco, suscitan la complacencia y alegran la pestaña de los aficionados asiduos, tan severos de suyo.

Martín / Vega, Paquillo, Martín

Cinco novillos de Manuel Martín-Peñato, muy bien presentados, 4º de preciosa estampa, 6º con gran trapío, ovacionado de salida; encastados y nobles. 5º, segundo sobrero de Caridad Cobaleda, terciado, con casta, en sustitución de otro del mismo hierro y este del titular, devueltos por inválidos. Gitanillo Vega, de Villafranca de los Barros: pinchazo, otro hondo, rueda de peones, estocada corta atravesada y rueda de peones (silencio); media atravesada trasera baja (silencio). Paquillo, de Villaviciosa de Odón (Madrid): dos pinchazos, estocada baja perdiendo la muleta y descabello (ovación y salida al tercio); estocada tendida y dos descabellos (oreja con algunas protestas). Miguel Martín, de Carriel de los Montes (Toledo): pinchazo pescuecero, otro tendido, media estocada tendida y cuatro descabellos; la presidencia le perdonó un aviso (ovación y salida al tercio); pinchazo y estocada trasera (oreja e insistente petición de otra). Los tres novilleros, nuevos en esta plaza.Plaza de Las Ventas, 28 de septiembre. Segunda corrida de feria (fuera de abono). Media entrada.

A lo mejor, sin taurinos sabelotodo, la fiesta se arreglaba. He aquí un dato: durante los últimos años ha irrumpido en la fiesta multitud de novilleros que practicaban un toreo de amplio repertorio, ejecutado desde la ortodoxia e interpretado con exquisitez, y no bien avanzaban en la profesión de la mano de los taurinos sabelotodo.-que les vuelven locos-, quedaban convertidos en aburridos pegapases.

En fin, no era el caso de estos novilleros sin exigencias, aún. Los novilleros que se encontraron con los lujosos novillos eran vírgenes de vulgaridad. Bueno, tampoco es que los tres novilleros vírgenes hicieran maravillas; es más, en ocasiones los novillos oscurecían sus indudables deseos y quedaba más patente la encastada nobleza de los animales que el arte de los seres humanos. Lo mismo que ocurre en la vida real, por otra parte, pero esa es otra cuestión.

Detalles de muletero estilista se le apreciaron a Paquillo, en el DNI -según el programa oficial- Francisco Javier Rodríguez. Dio redondos, naturales, ayudados torerísimos, principalmente en su primer toro, aunque la oreja se la regalara el presidente en el otro. Miguel Martín, en el DNI -según el programa oficial- tal cual se pronuncia, bajaba de calidad con la muletilla, mientras subía en los lances de capa y en los pares de banderillas, sobre todo uno saliendo de tablas que puso al público en pie. Gitanillo Vega, en el DNI -según el programa oficial- avliS agieV ognimoD, intentó el toreo puro mas no lo ejecutaba arreunío y eso, con novillos de lujo, se nota mucho. Es decir, que le salió al revés, como su nombre en el programa oficial. Lo cual no significa que mañana, sin ir más lejos, no le salga al derecho.

Novilleros principiantes es lógico que estén verdecillos, que los nervios les impidan arreunir, que se les escapen sin el debido aprovechamiento muchas de las nobles embestidas de una preciosa novillada. La severa afición lo entendió así, estuvo amable, aplaudió mucho, pasó una tarde divertida, pudo contemplar, por el mismo precio, dos soberanos puyazos de Mejorcito, y cuando abandonó el coso, se iba más contenta que unas pascuas.

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