Capital del plagio
El pasado martes 31 de julio vi en EL PAÍS un anuncio a toda plana que me causó consternación. El MET (The Metropolitan Museum of Art, de Nueva York) va a hacer algo en Madrid, me dije. Pero cuál fue mi sorpresa al caer en que lo que mis ojos contemplaban no era otra cosa que el logotipo de la capitalidad cultural europea del 92. ¿Plagio? Sin duda. Difícil será creer en coincidencias casuales. En cualquier caso, es menester cambiar el logotipo, idéntico al del célebre museo neoyorquino, no sea que por la fachada hagamos el ridículo el diseñador gráfico, las autoridades, el consorcio y, lo que ...
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El pasado martes 31 de julio vi en EL PAÍS un anuncio a toda plana que me causó consternación. El MET (The Metropolitan Museum of Art, de Nueva York) va a hacer algo en Madrid, me dije. Pero cuál fue mi sorpresa al caer en que lo que mis ojos contemplaban no era otra cosa que el logotipo de la capitalidad cultural europea del 92. ¿Plagio? Sin duda. Difícil será creer en coincidencias casuales. En cualquier caso, es menester cambiar el logotipo, idéntico al del célebre museo neoyorquino, no sea que por la fachada hagamos el ridículo el diseñador gráfico, las autoridades, el consorcio y, lo que es peor, los madrileños.-