Cartas al director

Virus en el ordenador

Hecho a). Un funcionario introduce un virus en un ordenador del Congreso de los Diputados sin que, según fuentes oficiales, pusiera en ningún momento en peligro la base de datos. El funcionario es expulsado inmediatamente.Hecho b). El director general de la Policía alerta por teléfono a cierto periodista -recientemente semiindultado de penas impuestas por dos delitos por desacato y al que Dios, es evidente, ha negado luces para distinguir responsabilidades- que un amigo suyo (del periodista) iba a tener problemas.

Al día siguiente del referido aviso telefónico, el amigo del p...

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Hecho a). Un funcionario introduce un virus en un ordenador del Congreso de los Diputados sin que, según fuentes oficiales, pusiera en ningún momento en peligro la base de datos. El funcionario es expulsado inmediatamente.Hecho b). El director general de la Policía alerta por teléfono a cierto periodista -recientemente semiindultado de penas impuestas por dos delitos por desacato y al que Dios, es evidente, ha negado luces para distinguir responsabilidades- que un amigo suyo (del periodista) iba a tener problemas.

Al día siguiente del referido aviso telefónico, el amigo del periodista es detenido por narcotráfico en la llamada Operación Mago. Según el Ministerio del Interior, "nunca una indiscreción ha abortado una operación antidroga".

En vista de ello, nuestro Ejecutivo ni siquiera se plantea la posibilidad de destituir al director general autor del chivatazo.

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Ahora juzguen ustedes cuál de los dos hechos es más grave y merece un castigo más fulminante.

Para mí, la cosa está muy clara; lo que pasa es que la cuerda, también en democracia, siempre se rompe por lo más flojo.- .

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