El mal de los sofocos

Expertos de todo el mundo recomiendan el tratamiento hormonal de la menopausia

La menopausia o declinación de la función ovárica con pérdida de la capacidad reproductora se produce a la edad media de 50 años; sin embargo, la esperanza de vida actual de la mujer se sitúa en torno a los 75. Si hasta hace 200 años la mujer moría con su regla, ahora pasa una tercera parte de su vida sin ella. Los especialistas afirman que ésta es la causa del creciente interés sobre los diversos trastornos fisiológicos que limitan a la mujer cuando aún está integrada en el mundo laboral. Contra ello aseguran que el tratamiento hormonal es la mejor solución.

Aunque la mentalidad de las...

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La menopausia o declinación de la función ovárica con pérdida de la capacidad reproductora se produce a la edad media de 50 años; sin embargo, la esperanza de vida actual de la mujer se sitúa en torno a los 75. Si hasta hace 200 años la mujer moría con su regla, ahora pasa una tercera parte de su vida sin ella. Los especialistas afirman que ésta es la causa del creciente interés sobre los diversos trastornos fisiológicos que limitan a la mujer cuando aún está integrada en el mundo laboral. Contra ello aseguran que el tratamiento hormonal es la mejor solución.

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Aunque la mentalidad de las españolas está cambiando, son muchas las que todavía no llevan a cabo los chequeos ginecológicos periódicos aconsejados por los expertos. Los sofocos, la sequedad vaginal y las fracturas producidas por osteoporosis (pérdida de masa ósea) son las principales causas que llevan a las mujeres mayores de 45 años hasta la consulta ginecológica. "Pocas pacientes solicitan inicialmente un tratamiento hormonal", afirmó el ginecólogo Maximiliano Eljerrat en el transcurso de un seminario que sobre la llamada Edad crítica de la mujer ha tenido lugar los pasados días en El Escorial, dentro de los cursos de verano de la Universidad Complutense de Madrid.

Prevención

La mayoría de los ginecólogos reunidos en El Escorial se mostraron de acuerdo en que las patologías más comunes derivadas del climaterio son evitables y deben ser prevenidas. También coincidieron en que el tratamiento hormonal es el más lógico para tratar esta carencia estrogénica. Mientras que las mujeres españolas que reciben dicho tratamiento aún son muy escasas, en Estados Unidos y en varios países europeos es ya una práctica habitual. "Los médicos españoles", afirmó Eljarrat, "se muestran cada vez menos reticentes al tratamiento hormonal".

Hasta hace cinco años no existían en España unidades para el tratamiento de este problema, y hace sólo ocho meses que se creó, dentro de la Asociación Española de Ginecología, el primer grupo especial dedicado a temas de la menopausia. Según Eljarrat, esto parece indicar un principio de cambio en la sensibilidad de los ginecólogos, aunque, a su juicio, esta especialidad no ha sido aún bien integrada en la asistencia sanitaria de la Seguridad Social. "En los ambulatorios españoles no se trata la menopausia. Hablar de relaciones sexuales y tratamientos hormonales es impensable en estos centros cuando hay que atender a 6.0 pacientes en dos horas" subrayó ElJarrat.

"No existen verdaderas alternativas a la terapia hormonal, aunque se han intentado tratamientos con extractos de plantas o de órganos, tranquilizantes y sedantes", señaló Christian Lauritzen, director de la Clínica de Mujeres de la Universidad ULM, en la RFA.

El tratamiento hormonal pretende conseguir una concentración suficiente de estrógenos en la sangre para prevenir o tratar enfermedades derivadas, como la osteoporosis, la sequedad vaginal, problemas cardiovasculares y cánceres de útero o de mama. Estos trastornos, que se producen en las mujeres menopáusicas a medio y largo plazo, son la principal causa de mortandad entre las personas del sexo femenino. Es verdad que las primeras sintomatologías del climaterio (sofocos, insomnio, irritabilidad y depresión) perturban notablemente su calidad de vida.

Algunas mujeres y ciertos médicos se muestran temerosos todavía ante los posibles efectos secundarios del tratamiento con hormonas. "Éstos son, por lo general, médicos mal informados", indicó Lauritzen. "Está perfectamente demostrado por numerosos estudios que no existe relación entre tratamiento hormonal y cáncer", aseguró.

Un estudio alemán realizado a partir del historial clínico de 1.200 mujeres, durante un periodo de 22 años, demuestra que la incidencia de cáncer tanto de mama como de endometrio (cuerpo del útero) es menor entre las mujeres que han recibido un tratamiento hormonal mixto (estrógenos y progesterona) que entre aquellas que no lo han recibido. La cuestión es buscar la forma de administración y dosis adecuada.

Dieta y ejercicio

"EL tratamiento hormonal es fundamental para los trastornos cardiovasculares", señaló Morris Noteloviz, director de una clínica de tratamiento climatérico en Florida (EE UU), para quien el ejercicio flisico y una dieta equilibrada aumentan los efectos beneficiosos. "De hecho, la práctica deportiva en sí misma -excepto el footing- contribuye a frenar el desarrollo de la osteoporosis", subrayó Noteloviz.

Lauritzen añadió que un tratamiento preventivo eficaz de la osteoporosis réquiere la administración de estrógenos durante un periodo mínimo de 10 años a partir de los primeros síntomas menopaúsicos. "El índice de mortalidad se reduce entre las que reciben estrógenos y prolongan su vida entre un año y medio y dos años".

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