La fuga radiactiva de Vandellòs no pasó a la atmósfera

Una fuga no controlada en el circuito primario de la central nuclear de Vandellós 2 (Tarragona) ocasionó ayer una acumulación de vapor de agua radiactivo, procedente del sistema de refrigeración del reactor, en el edificio de contención de la planta. El accidente motivó la activación del Plan de Emergencia Nuclear de Tarragona (Penta) en su fase cero, que no supone la expulsión de productos radiactivos a la atmósfera. El suceso fue considerado como "incidente" por la normativa internacional, que sólo contempla la calificación de "accidente" cuando se produce una fuga de radiactividad al exteri...

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Una fuga no controlada en el circuito primario de la central nuclear de Vandellós 2 (Tarragona) ocasionó ayer una acumulación de vapor de agua radiactivo, procedente del sistema de refrigeración del reactor, en el edificio de contención de la planta. El accidente motivó la activación del Plan de Emergencia Nuclear de Tarragona (Penta) en su fase cero, que no supone la expulsión de productos radiactivos a la atmósfera. El suceso fue considerado como "incidente" por la normativa internacional, que sólo contempla la calificación de "accidente" cuando se produce una fuga de radiactividad al exterior.

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El accidente, cuyas causas se desconocen hasta el momento, fue calificado por los servicios de Protección Civil y fuentes del sector eléctrico consultadas de "poco grave", ya que la parada del reactor se realizó en caliente (disminución gradual de la producción de energía).La confusión informativa en las primeras horas hizo cundir la alarma entre la población, muy sensibilizada tras el grave accidente de la central nuclear de Vandellòs I del pasado 19 de octubre, que obligó al Ministerio de Industria y Energía a ordenar su clausura. Las dos plantas atómicas se encuentran separadas por unos 20 metros de distancia, frente a la costa en el núcleo de Hospitalet de I'Infant, y muy cerca de distintas urbanizaciones turísticas.

La fuga, de unos 280 litros hora de vapor de agua -los índices normales se sitúan en 227 litros / hora- sólo afectó a la denominada cuarta barrera, es decir, al edificio de contención del reactor, y por lo tanto, no hubo vertido del producto contaminado a la atmósfera. La central nuclear de Vandellòs II es una planta de tercera generación, de las de agua a presión. El sistema de refrigeración del núcleo funciona mediante agua del mar, tras pasar distintos circuitos de desalinización.

La fuga se detectó a las 7,50 horas de ayer e inmediatamente se activó el Plan de Emergencia Interior de la central en su categoría 1, y el Penta en su fase 0, antes de la emergencia. Este nivel no comporta la adopción de medidas de protección a la población civil.

Sobre las 14.30 horas de ayer el reactor alcanzó la potencia 0, y una hora antes se desconectó la central de la red eléctrica. Operarios de la planta penetraron entonces en el edificio del reactor para detectar la fuga. Los ingenieros de la central condensaron el vapor de agua acumulado en el edificio de contención, que fue almacenado en tanques para ser eliminado mediante un proceso de ionización.

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