Ningún alto cargo de Justicia supervisó la falsa noticia de la muerte de un grapo

La Investigación Interna abierta por el Ministerio de Justicia para depurar responsabilidades sobre la falsa noticia de la muerte de José Manuel Sevillano Martín, preso de los GRAPO, se centra en el Hospital Gregorio Marañón y en el área de sanidad de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias. En el momento de decidir facilitar a la prensa la información de la falsa muerte ningún alto cargo del departamento de Justicia se encontraba en su despacho. Enrique Múgica dijo ayer que la falsa información pudo partir del Gregorio Marañón. José Manuel Sevillano sigue en estado "muy grave" de...

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La Investigación Interna abierta por el Ministerio de Justicia para depurar responsabilidades sobre la falsa noticia de la muerte de José Manuel Sevillano Martín, preso de los GRAPO, se centra en el Hospital Gregorio Marañón y en el área de sanidad de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias. En el momento de decidir facilitar a la prensa la información de la falsa muerte ningún alto cargo del departamento de Justicia se encontraba en su despacho. Enrique Múgica dijo ayer que la falsa información pudo partir del Gregorio Marañón. José Manuel Sevillano sigue en estado "muy grave" debido a las lesiones sufridas en el cerebro por la falta de oxígeno tras las paradas respiratoria y cardiorrespiratoria. El estado de salud de los otros dos grapos internados en el Gregorio Marañón -Jaime Simón y Joaquín Calero- es estacionario.Fuentes penitenciarias han señalado que desde el Gregorio Marañón se informó de la muerte del preso. Esta versión se contradice con la del director del propio centro clínico, José Manuel Ollero, quien negó que desde el hospital se hubiera informado de la muerte de Sevillano. Otras fuentes de Justicia apuntan a un error de interpretación en el mensaje entre el hospital e Instituciones Penitenciarias.

Todas las fuentes coinciden en que la comunicación entre el Gregorio Marañón y Justicia sobre el falso fallecimiento se efectuó por teléfono y que los interlocutores fueron una persona del hospital y un funcionario de la subdirección general de Sanidad Penitenciaria. En aquel momento, no se encontraban en el ministerio ni Enrique Múgica, ni el subsecretario Fernando Pastor, ni el director de Instituciones Penitenciarias Antoni Asunción.

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