Los guerrilleros colombianos que secuestraron a Berrocal piden 1.200 millones por su liberación

El empresario español Pablo Martín Berrocal, de 55 años, secuestrado en Quito el pasado 9 ole agosto, se encuentra en Colombia en poder del grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN), según fuentes de la Seguridad del Estado en España. Dichas fuentes han precisado que este grupo guerrillero ha tratado de mantener en secreto su autoría para facilitar la negociación del rescate. Intermediarios de la familia se han trasladado a Colombia para conseguir su puesta en libertad.

Al parecer, el grupo guerrillero, que dirige un cura aragonés llamado Manuel Pérez, el hombre más buscad...

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El empresario español Pablo Martín Berrocal, de 55 años, secuestrado en Quito el pasado 9 ole agosto, se encuentra en Colombia en poder del grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN), según fuentes de la Seguridad del Estado en España. Dichas fuentes han precisado que este grupo guerrillero ha tratado de mantener en secreto su autoría para facilitar la negociación del rescate. Intermediarios de la familia se han trasladado a Colombia para conseguir su puesta en libertad.

Al parecer, el grupo guerrillero, que dirige un cura aragonés llamado Manuel Pérez, el hombre más buscado actualmente en Colombia junto con los cabecillas del narcotráfico, ha exigido 10 millones de dólares (tinos 1.200 millones de pesetas) por la liberación del empresario español, cantidad que está siendo negociada actualmente en Colombia por intermediarios y socios de Berrocal en Ecuador.Berrocal es propietario de la plaza de toros de Quito y en España participa, junto con su hermano -el empresario taurino José Luis Martín Berrocal-, de la propiedad de la empresa de transportes La Sepulvedana. La esposa del secuestrado, Blanca Paradela, ha estado acompañada por su yerno, Ignacio Herrero, piloto ¿le la compañía Iberia casado con la única hija del matrimonio, Blanca Martín Paradela.

La familia Berrocal está actuando al margen de cualquier policía con el único propósito de que el desenlace del secuestro sea positivo. Según las fuentes españolas consultadas, la familia Berrocal está reuniendo dinero para pagar una parte del rescate, puesto que han transmitido al ELN que es una cantidad muy elevada la que exige por la liberación del empresario. Al parecer, ya ha habido más de dos contactos con los secuestradores y se está estudiando la forma de hacer Ilegar el dinero al grupo guerrillero.

Pablo Martín Berrocal fue considerado objetivo por el grupo guerrillero al aparecer asiduamente en los medios de comunicación como empresario taurino durante las temporadas de corridas en Quito. Las fuente consultadas añaden que su personalidad también era conocida en Colombia, donde existe una importante afición al mundo taurino.

El ELN esperó más de un mes para tomar contacto con la familia del empresario e iniciar una negociación con todo tipo de discreción y cautela, según las fuentes consultadas.

Al parecer, la esposa del empresario, Blanca Paradela, y un socio y amigo de Berrocal en Ecuador, José Luis Bruzone, se han trasladado a Colombia para dirigir los contactos con los secuestradores.

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Discreción

Según fuentes españolas, el ELN solicitó la máxima discreción a la familia para iniciar el proceso de negociaciones. El ELN se ha venido financiado del impuesto que cobraba a las compañías petrolíferas norteamericanas que operan en Colombia.

Este grupo guerrillero es el único que no ha aceptado el diálogo con el Gobierno de Virgilio Barco, que recientemente ha firmado un acuerdo con el M-19 por el que esta organización se compromete a concluir las acciones terroristas y entregar las armas. Éste ha sido el final de un largo proceso de negociaciones que en ningún momento se ha planteado el ELN.

Los policías españoles enviados a Quito nada más producirse el secuestro han informado puntualmente a la dirección de la Seguridad del Estado española sobre la autoría del secuestro y el inicio de los contactos con el grupo, aunque también han insistido en que se guardara la reserva para evitar cualquier desliz que pudiera traer un desenlace fatal al empresario español.

Las fuentes consultadas han añadido que las negociaciones se iniciaron a primeros de septiembre, mientras la policía ecuatoriana seguía despistada investigando diferentes hipótesis.

Posteriormente, investigadores de Ecuador se trasladaron a Colombia con fotos robot de los secuestradores para tratar de identificar a los autores. Incluso la policía había centrado sus sospechas desde hacía tiempo en grupos colombianos y no descartaba que pudiera ser alguna organización que operara a las órdenes de los narcotraficantes. La policía ecuatoriana cree que el ELN puede haber utilizado a hombres de la sierra ecuatoriana para despistar a los investigadores. El conductor del empresario española declaró que el acento de los secuestradores era ecuatoriano y precisó que sobre todo era típico de la zona de los serranos. Este hecho podría ser el causante del despiste de la policía a la hora de determinar al grupo secuestrador.

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