Economía lanza la propuesta de crear una policía fiscal

La creación de un grupo especial de funcionarios con amplias competencias de investigación fue una de las propuestas lanzadas ayer por el director general de Inspección del Ministerio de Economía y Hacienda, Manuel Bravo, para una lucha más eficaz contra el fraude fiscal. Manuel Bravo precisó que este grupo tendría funciones similares a las de la policía fiscal en otros países. En su opinión, debería actualizarse el límite de los cinco millones de pesetas para la consideración de delito fiscal y habría que estrechar el criterio que ahora tienen los tribunales de justicia sobre el dolo o...

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La creación de un grupo especial de funcionarios con amplias competencias de investigación fue una de las propuestas lanzadas ayer por el director general de Inspección del Ministerio de Economía y Hacienda, Manuel Bravo, para una lucha más eficaz contra el fraude fiscal. Manuel Bravo precisó que este grupo tendría funciones similares a las de la policía fiscal en otros países. En su opinión, debería actualizarse el límite de los cinco millones de pesetas para la consideración de delito fiscal y habría que estrechar el criterio que ahora tienen los tribunales de justicia sobre el dolo o intención de defraudar.El cuello de botella que se produce cuando un expediente de delito fiscal llega a los tribunales de justicia es uno de los obstáculos que se propone remover la actual Administración tributaría. Manuel Bravo apuntó ayer en este sentido la creación de una especie de policía fiscal que reúna las pruebas necesarias para que un expediente de delito fiscal prospere y el defraudador sea castigado. Este grupo empezaría a actuar después de que haya sido determinada la deuda tributaría, con mayores posibilidades legales de investigación que los inspectores de Hacienda.

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En opinión de Manuel Bravo, el actual límite de los cinco millones de pesetas a partir del cual un fraude es considerado delito fiscal debería "cuando menos actualizarse". Habrá que ver, en este sentido, cómo afecta la sentencia del Tribunal Constitucional del pasado 20 de febrero a esta cifra, ya que hasta ahora se toma en cuenta por unidad familiar. El director general de Inspección añadió que, más que la cifra concreta, lo que le preocupa es que los tribunales tienen un concepto demasiado amplio sobre lo que es la intención de defraudar, por lo que apostó por "una definición más estrecha del dolo".

La capacidad informática de Hacienda para procesar el aluvión de datos sobre primas únicas, cesiones de créditos o cuentas financieras que está obteniendo la Administración en los últimos meses no tiene límites, a juzgar por las palabras del director general de Inspección. "Tenemos capacidad para digerir todo lo que nos echen".

En relación a las primas únicas, Bravo dijo que los criterios para la inspección no se van a guiar sólo por las de mayor volumen económico. "Tendremos en cuenta aquellos casos en los que se presente una mayor disparidad entre la cuantía de la prima y las bases imponibles declaradas en un momento, así corno por las complementarias que se presenten".

Manuel Bravo explicó que el plan de la inspección para el próximo año ya está diseñado en una primera propuesta. Éste no va a ser ampliado, sino que se va a solapar con los datos obtenidos de los titulares de las pólizas de seguro de prima única. En algunos casos, como el de Cataluña, todos los efectivos de la zona se van a centrar en esta bolsa de fraude, mientras que en otras áreas se llevará a cabo con normalidad y se atenderá al fenómeno según su importancia.

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