Cornada de 20 centímetros en el muslo

, Curro Romero fue ingresado en la clínica Nuestra Señora de Loreto, de Madrid, a donde llegó hacia las 22.30. En la enfermería de la plaza había sido intervenido quirúrgicamente por espacio de una hora, aproximadamente.

El cirujano que efectuó la operación facilitó el siguiente parte facultativo: "Herida por asta de toro en la cara interna del muslo izquierdo, con una trayectoria ascendente de 10 centímetros que interesa aponeurosis y plano muscular, y otra de 20 centímetros descendente, que interesa aponeurosis y músculo recto anterior. Ligera hemorragia venosa. Otra herida en sedal ...

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, Curro Romero fue ingresado en la clínica Nuestra Señora de Loreto, de Madrid, a donde llegó hacia las 22.30. En la enfermería de la plaza había sido intervenido quirúrgicamente por espacio de una hora, aproximadamente.

El cirujano que efectuó la operación facilitó el siguiente parte facultativo: "Herida por asta de toro en la cara interna del muslo izquierdo, con una trayectoria ascendente de 10 centímetros que interesa aponeurosis y plano muscular, y otra de 20 centímetros descendente, que interesa aponeurosis y músculo recto anterior. Ligera hemorragia venosa. Otra herida en sedal en el escroto, de 10 centímetros, con evisceración del testículo".

Fuentes de la clínica Loreto informaron a primeras horas de esta madrugada que Curro Romero se encontraba consciente, aunque muy molesto, con dolores por todo el cuerpo, y había pedido calmantes. Los médicos procedían a explorarle pecho y espalda, pues en dichas zonas era donde sentía los dolores más fuertes, producidos por la cogida y consecuente voltereta. Personas allegadas al diestro dijeron también que este llevaba tiempo con molestias de espalda y temían que se acentuaran como consecuencia de la caída.

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El torero hablaba muy poco, se sentía muy fatigado, y preguntó a su apoderado si el toro que le cogió había resultado bueno durante el resto de la lidia.

Antonio Posada se recupera

Por otra parte, el novillero Antonio Posada se recupera de la lesión cerebral que le produjo un novillo en la feria taurina del Corpus, de Granada, y ha abandonado la clínica madrileña donde se encontraba hospitalizado desde hace una semana.El torero, que fue atendido de un coágulo de sangre en la región parietal izquierda, todavía sufre fuertes dolores de cabeza y tiene ciertas dificultades para hablar, por lo que deberá ser sometido a una exploración el próximo día 19, donde se verificará si el coágulo ha desaparecido definitivamente.

Posada no pudo torear en la feria de San Isidro, donde estuvo anunciado dos tardes, y ha perdido otro importante número de festejos en diversas plazas a causa de la cogida. Ha sido trasladado a una finca de Villarrobledo para descansar, y su propósito es reaparecer el próximo día 25 en la feria de Algeciras, si los médicos, le dan el alta.

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