Los estudiantes chinos intentan invadir el Parlamento

ENVIADO ESPECIALUnos 6.000 manifestantes intentaron ayer invadir pacíficamente el Gran Palacio del Pueblo, la sede del Parlamento, situado en uno de los costados de la plaza de Tiananmen, en el quinto día seguido de masivas protestas de estudiantes. Los manifestantes fueron rechazados por los funcionarios del Parlamento en la escalinata, informa France Presse, mientras en la plaza -la explanada urbana más amplia del mundo- decenas de miles de jóvenes exigían democracia y la rehabilitación del dirigente reformista Flu Yaobang, muerto el pasado sábado.

La muerte de Hu Yaobang, ex secretar...

ENVIADO ESPECIALUnos 6.000 manifestantes intentaron ayer invadir pacíficamente el Gran Palacio del Pueblo, la sede del Parlamento, situado en uno de los costados de la plaza de Tiananmen, en el quinto día seguido de masivas protestas de estudiantes. Los manifestantes fueron rechazados por los funcionarios del Parlamento en la escalinata, informa France Presse, mientras en la plaza -la explanada urbana más amplia del mundo- decenas de miles de jóvenes exigían democracia y la rehabilitación del dirigente reformista Flu Yaobang, muerto el pasado sábado.

La muerte de Hu Yaobang, ex secretario general del Partido Comunista Chino (PCCh), ha servido de detonante de un vendaval de protestas juveniles en reclamo de democracia. La plaza de Tiananmen de Pekín -donde los manifestantes, en su mayoría jóvenes universitarios, han levantado un retrato gigantesco de Hu- iba a ser cerrada en la madrugada de hoy por las autoridades, que temen graves disturbios durante el funeral de Hu, previsto para hoy.El acto se celebrará en el Gran Palacio del Pueblo, y estará exclusivamente reservado a los dirigentes del Gobierno y del partido. Ningún dignatario extranjero ha sido invitado y la Prensa foránea no ha sido autorizada a cubrirlo en directo.

El intento de invasión de la sede parlamentaria -primero desde la fundación del régimen comunista en 1949- no tuvo mayores consecuencias, pese a que casi no había policías en el lugar en ese momento, informa Reuter. Los jóvenes, que querían exponer a los parlamentarios las demandas de su movimiento, optaron por quedarse sentados en la escalinata, mientras los otros participantes en la masiva manifestación se congregaban en torno al monumento a los Héroes del Pueblo, sobre el que pende desde hace dos días un retrato del fallecido líder realizado por los alumnos de la Escuela de Bellas Artes. En los cuatro costados figuran coronas de flores con leyendas que ensalzan su figura y otras que critican al Gobierno.¿Quién nos devuelve el alma de Hu?", dice una. El monumento se encuentra en un punto equidistante del mausoleo donde está embalsamado Mao Zedong y la puerta de entrada a la Ciudad Prohibida, en cuyo frente cuelga aún el único retrato callejero del Gran Timonel.

Marcha universitaria

La presencia de fuerzas del orden era hasta primeras horas de la tarde de ayer discreta, si bien se presume que miles de policías de paisano vigilan los movimientos de la gente.Al anochecer, dos grupos numerosos de alumnos de las universidades de Pekín y Qinghua iniciaron pacíficamente desde sus campus una marcha que posteriormente se convirtió en una sola columna de unas diez mil personas, que se dirigieron, enarbolando una enorme pancarta en la que se leía "Anticorrupción. Luto por Hu. Más libertad", hacia Tiananmen o Puerta de la Armonía Celestial. Los manifestantes fueron bloqueados por la policía a mitad de camino. Marchas pacíficas se sucedieron también en Shanghai, Tianjin Wuhan y Xian.

Tiananmen fue escenario de graves incidentes en marzo de 1976, dos meses después de la muerte de Zhou Enlai y poco antes del fallecimiento de Mao, que provocaron la tercera caída política del que es ahora número uno de China, Deng Xiaoping. Las concentraciones de estos días, aunque son protagonizadas en su mayor parte por la clase estudiantil y los intelectuales, están despertando la simpatía, poco a poco, del resto de los demás estratos de la sociedad china, irritada por la crisis inflacionaria, el desequilibrio de riqueza, la corrupción y los privilegios de que gozan sus dirigentes.

Demandas estudiantiles

Muchos jóvenes copiaban ayer en cuartillas, junto al monumento a los Héroes del Pueblo, las peticiones que han emergido con la muerte de Hu: rehabilitación de la figura del fallecido líder, explicación oficial sobre la razón que llevó a su dimisión en enero de 1987 -el partido le acusó de "liberalismo burgués" y de incapacidad para frenar las protestas estudiantiles que estallaron un mes antes en favor de la democracia-, dimisión del Gobierno, declaración pública de los ingresos de los actuales dirigentes y reforma de la educación.Entre tanto, anoche, en el mismo escenario donde Mao Zedong enfebrecía en los años sesenta a las masas uniformadas que enarbolaban el libro rojo, se respiraba un clima de gran tensión, y los eslóganes en favor de la libertad se confundían con los sones de La Internacional.

El homenaje fúnebre de hoy en el Gran Palacio del Pueblo consistirá en un discurso del secretario general del partido, Zhao Ziyang, discípulo, como Hu, de Deng Xiaoping y sustituto de aquél después de que Deng considerase en enero de 1987 que Hu Yaobang iba demasiado veloz en el proceso de reformas emprendido hace diez años. Existe expectación por saber si el número uno chino asistirá o no al acto. La presencia del dirigente calmará algo los ánimos de los estudiantes, que, pese a centrar ahora todas sus críticas en la figura de Deng por haber "traicionado" los ideales de la reforma, verán en ese gesto un respeto hacia uno de los gobernantes chinos que más creyó en el proceso de modernización del país y al que los jóvenes acaban de tomar como símbolo de libertad.