Choque psicológico

En los rostros de los pocos marroquíes enterados ayer de la inminente entrevista de Hassan II con una delegación del Polisario se leía el choque psicológico. De pronto, todos los mensajes que Hassan II llevaba lanzando desde el pasado verano en distintos discursos y entrevistas cobraban un profundo significado.

El rey de Marruecos comenzó por anunciar la "próxima instauración de la estabilidad en el Sáhara", gracias a "un proceso legal que no provoque vencedores ni vencidos". Después, aseguró a los "hijos descarriados" de Tinduf, que la Patria es clemente". Por último, anunc...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

En los rostros de los pocos marroquíes enterados ayer de la inminente entrevista de Hassan II con una delegación del Polisario se leía el choque psicológico. De pronto, todos los mensajes que Hassan II llevaba lanzando desde el pasado verano en distintos discursos y entrevistas cobraban un profundo significado.

El rey de Marruecos comenzó por anunciar la "próxima instauración de la estabilidad en el Sáhara", gracias a "un proceso legal que no provoque vencedores ni vencidos". Después, aseguró a los "hijos descarriados" de Tinduf, que la Patria es clemente". Por último, anunció que estaba dispuesto a recibir a miembros del Polisario, "para escuchar sus razones".

Medios nacionalistas y socialistas marroquíes reafirmaron ayer a EL PAÍS su firme militancia en la causa de la irreversible marroquinidad del Sáhara". Esos medios manifestaron su "convicción absoluta" de que Hassan II no renunciará jamás a tal principio. No obstante, otras declaraciones recientes del soberano cobraron, para la oposición marroquí, una nueva luz.

Más información

La pasada semana, Hassan II declaró que la Constitución marroquí es "flexible y mejorable". En ocasiones anteriores se había mostrado partidario de lo que llamó la "regionalización" del país. Tales afirmaciones dejan entrever la posibilidad de una solución al conflicto que pase por la concesión de una amplia autonomía al Sáhara occidental. Solución semejante, señalaban ayer fuentes de la oposición, haría precisa una modificación de la Constitución y, probablemente, la concesión del mismo estatuto a otras regiones del país con identidades particulares, en especial el norte del reino.

El Polisario, por su parte, tampoco está dispuesto a renunciar a la idea de soberanía, según las últimas declaraciones de sus dirigentes a este periódico. Eso sí, podría estar conforme con una confederación con el reino jerifiano, pero siempre que el Sáhara occidental sea previamente independiente, merced a la celebración de un referéndum de autodeterminación bajo el padrinazgo de la ONU.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En