Piedras biliares trituradas por ondas

La revolución llegó primero a los riñones. Un aparato denominado litotriptor permitió destruir los cálculos renales mediante ondas de choque de forma incruenta y sin necesidad de intervención quirúrgica. El primero de estos aparatos se instaló en España en 1984. Ahora la revolución de las ondas llega a la vesícula biliar. Un modelo especial de litotriptor permite destruir las piedras biliares, cuya extracción precisaba hasta ahora una intervención quirúrgica compleja. Las dos primeras máquinas de litotricia biliar acaban de ser instaladas en dos clínicas de Madrid y Barcelona.

La litotr...

La revolución llegó primero a los riñones. Un aparato denominado litotriptor permitió destruir los cálculos renales mediante ondas de choque de forma incruenta y sin necesidad de intervención quirúrgica. El primero de estos aparatos se instaló en España en 1984. Ahora la revolución de las ondas llega a la vesícula biliar. Un modelo especial de litotriptor permite destruir las piedras biliares, cuya extracción precisaba hasta ahora una intervención quirúrgica compleja. Las dos primeras máquinas de litotricia biliar acaban de ser instaladas en dos clínicas de Madrid y Barcelona.

La litotricia biliar es un complejo aparato que localiza y enfoca las piedras biliares y luego las pulveriza mediante la aplicación sistemática de ondas de choque extracorpóreas. El paciente se encuentra cómoda mente instalado en una camilla y la intervención dura escasamente una hora, sin necesidad de anestesia. Una vez pulverizadas las piedras, la arenilla resultante es expulsada a través del páncreas y del intestino normalmente en menos de seis meses.Uno de cada diez españoles tiene cálculos biliares, lo que quiere decir que cada año se realizan en España entre 3.000 y 5.000 intervenciones quirúrgicas por cada millón de habitantes. En una enfermedad de incidencia tan elevada, la posibilidad de no tener que recurrir a la cirugía constituye una revolución muy ventajosa desde el punto de vista terapéutico y económico, ya que su uso generalizado de este procedimiento puede proporcionar un importante ahorro.

"El sexo femenino es afectado especialmente por la litiasis biliar, hasta el punto de que el 80% de quienes la padecen son mujeres, normalmente en edad fértil y en muchos casos obesas", explica el doctor Joan Piera Mas-Sardà, de la unidad de Cirugía de la clínica Dexeus.

"La litiasis biliar es una enfermedad que debe tratarse", añade el doctor Josep Maria Raventós, de la misma unidad. "Mueren por causas relacionadas con ella entre el 12% y el 20% de los pacientes que la padecen y no se tratan.

Hasta ahora, el único tratamiento eficaz era la extracción de los cálculos mediante cirugía, porque los tratamientos desarrollados en los últimos años sólo son efectivos en un 10%. de los casos y, además, pocas veces logran la destrucción total de la piedra". "La litotricia", añade, "representa un avance muy importante porque evita el peligro que siempre entraña una operación, especialmente en quienes tienen algún riesgo quirúrgico, y es tan eficaz como la cirugía".

Una sola sesión

Las ventajas para el paciente son evidentes: no sufre ningún traumatismo quirúrgico; es totalmente indolora, hasta el punto de que ni siquiera precisa anestesia local como ocurre con el litotriptor renal; reduce drásticamente la estancia hospitalaria y no requiere convalecencia. "Tenemos al paciente ingresado durante 24 horas, pero sólo para observación. Al día siguiente puede ya hacer vida normal", precisa el doctor Raventós.En ello radica la ventaja económica de la nueva técnica, ya que la intervención quirúrgica representa una estancia hospitalaria de más de diez días y varias semanas de baja laboral.

Los posibles efectos secundarios son también mínimos. Según el doctor Raventós, el 30% de los pacientes tratados sufren dolores mientras expulsan la arenilla, pero pueden combatirse eficazmente con un tratamiento. Un 3% sufre hematuria (presencia de sangre en la orina) debido al tránsito de las piedras, pero es pasajera y no tiene consecuencias.

Al principio se temió que esta técnica pudiera provocar pancreatitis -obstrucción del conducto del páncreas por algún fragmento de piedra-, pero hasta ahora sólo dos de los 2.000 pacientes que se han tratado en el mundo lo ha sufrido y sin consecuencias graves.

Ninguno de los 2.000 pacientes tratados hasta ahora, la mayor parte en Alemania, ha precisado una intervencion quirúrgica. Se trata, pues, de una técnica inocua de la que podrán beneficiarse en el futuro la mayor parte de los casos de litiasis biliar. De momento, sin embargo, su uso está restringido al 30% aproximadamente de los enfermos porque es una técnica de implantación muy reciente y no ha desarrollado todavía toda su potencialidad.

Indicaciones

"No todos los pacientes son candidatos por ahora", explica el doctor Raventós. "Excluimos en primer lugar a los pacientes asintomáticos (los que no sufren molestias), aunque creo que en el futuro serán incluidos como medida preventiva porque está comprobado que un 50% de ellos tendrán síntomas en el plazo de diez años y un 20% puede sufrir complicaciones graves si no se trata. También excluimos a los pacientes cuya vesícula biliar no funciona, porque la destrucción de los cálculos no aporta ninguna ventaja y además no pueden expulsar la arenilla", añade.Otro motivo de exclusión es que las piedras estén calcificadas, cosa que ocurre únicamente en un 10% aproximadamente de los casos de litiasis biliar: "De momento aplicamos la litotricia a pacientes que tienen cálculos radiótransparentes de un grosor inferior a 30 milímetros y un número inferior a cinco. Pero estos criterios se irán ampliando a medida que la técnica se afiance", concluye.