Armas y municiones, excluidas

A lo largo de los próximos cinco años, el sector público y las empresas privadas marroquíes que quieran comprar material español tienen a su disposición créditos baratos y a largo plazo por un montante total de 125.000 millones de pesetas.Una importante excepción a estas facilidades son las armas y municiones, que no pueden ser adquiridas con cargo a los créditos del protocolo financiero firmado el pasado miércoles por los ministros Fernández Ordóñez y Filali.

De esta. suma global, 75.000 millones se invertirán en obras de infraestructura realizadas en Marruecos por empresas españolas....

A lo largo de los próximos cinco años, el sector público y las empresas privadas marroquíes que quieran comprar material español tienen a su disposición créditos baratos y a largo plazo por un montante total de 125.000 millones de pesetas.Una importante excepción a estas facilidades son las armas y municiones, que no pueden ser adquiridas con cargo a los créditos del protocolo financiero firmado el pasado miércoles por los ministros Fernández Ordóñez y Filali.

De esta. suma global, 75.000 millones se invertirán en obras de infraestructura realizadas en Marruecos por empresas españolas.

Algunos de los proyectos se acogerán a esta financiación serán la creación de nuevas unidades de ácido sulfúrico y fosfórico en Jorf Lasfar, la construcción de una presa que suministre agua potable a Tánger, la mejora de las redes de ferrocarriles y telecomunicaciones marroquíes, y la electrificación rural.

Fuentes marroquíes no descartan una presencia española en la construcción del aeropuerto de Nador y de la línea de ferrocarril Nador-Taurirt.

Lo seguro es que en los próximos años las empresas españolas van a realizar no pocas de las obras públicas del reino magrebí.

Los otros 50.000 millones de pesetas están destinados a financiar las exportaciones españolas de bienes de equipo. Pueden acogerse a estos créditos los importadores marroquíes que quieran comprar en España maquinaria agrícola, camiones y equipos para hospitales y hoteles. Se trata de una estrategia dirigida a potenciar los sectores industriales españoles que no están aún bien implantados en Marruecos.

"España", señala una fuente de la representación comercial española en Rabat, "otorga un margen de confianza muy grande a Marruecos. El Estado español garantiza el cobro a las empresas españolas que quieran trabajar en este país".