El Gobierno surafricano 'estrangula' a la oposición política negra
El Gobierno surafricano recurrió a los poderes de emergencia al estrangular a la oposición negra con la decisión que tomó ayer de eliminar virtualmente a los 17 principales grupos opuestos a la política de segregación racial. Ninguna de ellos podrá realizar a partir de ahora actividades políticas. La medida alcanza, entre otros, al Frente Democrático Unido, que representa a unos dos millones de negros; al poderoso Congreso de los Sindicatos Surafricanos (COSATU), y a los comités de Apoyo de Padres de Detenidos (DPSC), de Crisis de Educación Nacional (NEEC) y para la liberación del líder negro ...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El Gobierno surafricano recurrió a los poderes de emergencia al estrangular a la oposición negra con la decisión que tomó ayer de eliminar virtualmente a los 17 principales grupos opuestos a la política de segregación racial. Ninguna de ellos podrá realizar a partir de ahora actividades políticas. La medida alcanza, entre otros, al Frente Democrático Unido, que representa a unos dos millones de negros; al poderoso Congreso de los Sindicatos Surafricanos (COSATU), y a los comités de Apoyo de Padres de Detenidos (DPSC), de Crisis de Educación Nacional (NEEC) y para la liberación del líder negro Nelson Mandela.
Este gesto se preveía desde hace más de dos meses, después de que el jefe de la policía de seguridad, el teniente general Johan van der Mewe, manifestó que las "organizaciones radicales legales" se habían convertido en el mayor "quebradero de cabeza" para el Gobierno de Pieter Botha.Funcionarios policiales creen que buena parte de esos grupos -algunos de los cuales se identifican como representantes en varios aspectos del prohibido Congreso Nacional Africano (ANC) dentro del país- estaban creando un clima maduro para la revolución, pese a las fuertes medidas de emergencia vigentes.
Sin embargo, a pesar de que el presidente Botha mencionó la amenaza de los activistas negros como la principal razón para imponer enmiendas a las medidas de emergencia, el golpe llega una semana antes de que se celebren dos elecciones cruciales de blancos en los distritos de Standerton y Schweizer Reneke, en la provincia conservadora de Transvaal.
Previsiones electorales
Los analistas políticos han previsto que el Gobierno puede perder terreno frente a un agresivo Partido Conservador en la disputa de esos dos escaños.Consciente de que la línea dura en política de seguridad interna y contra el ANC contribuyó a que el Partido Nacional consiguiera hace 10 meses una sólida victoria electoral, la decisión tomada ayer por el Gobierno no perjudicará las aspiraciones de sus candidatos en las urnas.
El ministro de Ley y Orden, Adriaan Vlok, que fue quien anunció la decisión el miércoles por la mañana en Ciudad del Cabo, afirmó que con la medida el Gobierno no ha pretendido ilegalizar completamente a las 17 organizaciones opositoras afectadas.
Vlok dijo que podrán conservar sus fondos, realizar funciones administrativas y mantener sus libros contables al día.
El representante del Gobierno dijo que las únicas actividades no permitidas serán aquellas "que pongan en peligro la seguridad pública... o la terminación del estado de emergencia".
Medidas restrictivas
Vlok manifestó que han sido tomadas contra 18 personas, cuyos nombres no mencionó, medidas restrictivas, lo cual supone quizá que se les haya prohibido abandonar sus domicilios durante la noche.Algunos de ellos se hallan detenidos, pero serán puestos en libertad una vez se levanten las medidas retrictivas, precisó el ministro.
Hay grupos y personas "que persisten en establecer, mantener y promover un clima revolucionario (...) revolucionarios y activistas, que se han dado cuenta de que la confrontación armada y la revolución violenta no puede tener éxito en Suráfrica, han creado varias alternativas para alcanzar sus objetivos", afirmó el ministro.