Vargas Llosa afirma en Sevilla que no aceptará cargos políticos

El escritor peruano Mario Vargas Llosa descartó totalmente ayer en Sevilla su participación directa en la política de su país, aunque reconoció que le han ofrecido muchos cargos.Su participación en la campaña contra la nacionalización de bancos, financieras y compañías de seguros en Perú estuvo motivada, según explicó, "por principios morales" y aclaró que "no es vocación ni mi intención seguir haciéndolo".

Vargas Llosa participó ayer en Sevilla en la Asamblea Constituyente del Instituto Iberoamericano de Derecho del Mar, organismo que promocionará la uniformidad legislativa marítima en...

El escritor peruano Mario Vargas Llosa descartó totalmente ayer en Sevilla su participación directa en la política de su país, aunque reconoció que le han ofrecido muchos cargos.Su participación en la campaña contra la nacionalización de bancos, financieras y compañías de seguros en Perú estuvo motivada, según explicó, "por principios morales" y aclaró que "no es vocación ni mi intención seguir haciéndolo".

Vargas Llosa participó ayer en Sevilla en la Asamblea Constituyente del Instituto Iberoamericano de Derecho del Mar, organismo que promocionará la uniformidad legislativa marítima en el área iberoamericana.

Vargas Llosa, tras descartar su participación en política diciendo que "a los 51 años se tiene claro qué se quiere ser en la vida", aseguró que el proceso de nacionalizaciones alentado por el presidente peruano, Alan García, pone en peligro la democracia en su país, "un peligro", matizó, "que no se entiende bien en Europa".

Para el escritor, Gobierno y Estado están bien diferenciados en las viejas democracias europeas, lo que no ocurre en las frágiles democracias de los países subdesarrollados. "En estos países, el Gobierno usufructúa del Estado como si fuera de su propiedad. En la práctica, el Gobierno utiliza a su antojo los medios de comunicación, aunque pertenezcan al Estado. Por esto es un peligro que el Gobierno se haga con un poder económico tan desorbitado. Se convertiría en el amo y señor de los préstamos, y la democracia sufriría una desestabilización interna, ya que el Gobierno utilizaría este poder en beneficio propio, neutralizando a la oposición y poniendo de rodillas a quienes no le aceptan". Esta situación, dice, sólo aumentaría "el grado de corrupción, que ya es grande, como en todo país subdesarrollado".

El escritor dijo que no está distanciado de los objetivos perseguidos por el presidente García. "Estoy de acuerdo", dijo, "en que la propiedad está muy concentrada en mi país, y también lo estoy con los topes a la propiedad acumulada en los bancos, pero es mejor que haya 6.000 propietarios que sólo uno".

Vargas Llosa valoró positivamente la concesión del Nobel de la Paz al presidente de Costa Rica, óscar Arias, "por su esfuerzo, que al principio parecía quijotesco y utópico". Alabó también su "perseverancia y habilidad diplomática, que le han ganado el respaldo del mundo".

Apoyo de García

Por su parte, el presidente Alan García envió ayer un telegrama al Comité Nobel de Estocolmo, para apoyar oficialmente la candidatura de Vargas Llosa al premio Nobel de Literatura, informa Efe. "En nombre propio, a la vez que recogiendo un sentir, de la ciudadanía y en reconocimiento a su obra literaria, me adhiero a la propuesta [de Vargas Llosa al Nobel], ansiando que el importante galardón sea concedido al gran novelista peruano", dice el cable de García.