El déficit público supera por segundo año el de la CE

El déficit o necesidad de financiación del conjunto de las administraciones públicas españolas, el 5,7% del producto interior bruto (PIB), superó el pasado año en un punto -el 21% en términos relativos- el 4,7% de promedio registrado en los 12 países de la Comunidad Europea (CE), según los datos provisionales y las estimaciones incluidas en el libro Actuación económica y financiera de las administraciones públicas en 1986, presentado ayer por el secretario de Estado de Hacienda, José Borrell.

Al presentar ayer el libro, que edita por tercer año la Intervención General del Estado y cuyas...

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El déficit o necesidad de financiación del conjunto de las administraciones públicas españolas, el 5,7% del producto interior bruto (PIB), superó el pasado año en un punto -el 21% en términos relativos- el 4,7% de promedio registrado en los 12 países de la Comunidad Europea (CE), según los datos provisionales y las estimaciones incluidas en el libro Actuación económica y financiera de las administraciones públicas en 1986, presentado ayer por el secretario de Estado de Hacienda, José Borrell.

Al presentar ayer el libro, que edita por tercer año la Intervención General del Estado y cuyas grandes magnitudes coinciden básicamente con las anticipadas por Hacienda a las Cortes en junio pasado y con los datos publicados semanas después por el Banco de España, José Borrell destacó 10 novedades: la estabilización del ritmo de crecimiento de la deuda, la reducción de un punto en el déficit y el saldo neto a financiar, la reducción de 2,2 puntos en las necesidades de endeudamiento antes de intereses, la bajada desde el 11,5% hasta el 7,8% en el tipo de interés de las emisiones de deuda, la devolución al Banco de España de 600.000 millones de pesetas, la contención del crecimiento del gasto público si se excluyen intereses, el aumento de la presión fiscal global sin que crezca la individual, la modernización de la estructura impositiva por el IVA, la descentralización financiera de las comunidades autónomas y el favorable contexto internacional (caída del dólar, de los precios del petróleo y de los tipos de interés).El libro, del que Borrell dijo que ha sido elaborado sin ánimo de alabar la gestión del Gobierno, resalta que la reducción del déficit de las administraciones públicas (1,83 billones de pesetas en 1986) fue todavía mayor si no se cuentan las cargas del saneamiento financiero de las empresas públicas, concretadas en la amortización anticipada de una gran parte de las deudas del Instituto Nacional de Industria (INI) asumidas por el Estado, ni las cargas por intereses. Descontando ambos efectos, la necesidad de financiación se situaría en el 0,8% del PIB, el menor porcentaje del período 1979-1986.

Los intereses efectivos, que casi alcanzaron los 1,32 billones de pesetas (el 4,1% del PIB), aumentaron todavía un 22,1 %. En los tres años anteriores su incremento anual osciló entre el 85% y el 60%.

Las prestaciones sociales se redujeron en 0,3 puntos del PIB.

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