Ambigua respuesta de Irán a la resolución de la ONU que pide un alto el fuego inmediato

El Gobierno de Irán ha respondido de forma ambigua a la resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que pide un alto el fuego inmediato en la guerra entre ese país e Irak. Teherán considera que algunos aspectos de la resolución no son satisfactorios para sus intereses, aunque no descarta que puedan darse áreas de colaboración con la ONU para poner fin al conflicto iniciado en el Golfo hace más de siete años.

El embajador iraní ante las Naciones Unidas, Said Rajai Jorasani, se entrevistó en la noche del martes con el secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar, p...

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El Gobierno de Irán ha respondido de forma ambigua a la resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que pide un alto el fuego inmediato en la guerra entre ese país e Irak. Teherán considera que algunos aspectos de la resolución no son satisfactorios para sus intereses, aunque no descarta que puedan darse áreas de colaboración con la ONU para poner fin al conflicto iniciado en el Golfo hace más de siete años.

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El embajador iraní ante las Naciones Unidas, Said Rajai Jorasani, se entrevistó en la noche del martes con el secretario general de la ONU, Javier Pérez de Cuéllar, para entregar la respuesto iraní y discutir el texto de la resolución, ya aceptada por Irak. Al término de esa entrevista, que duró 20 minutos, el diplomático iraní declaró: "No la aceptamos ni la rechazamos". Jorasani dijo que había hecho a Pérez de Cuéllar "una serie de comentarios sobre la resolución y también especificando las áreas en las que es posible trabajar junto al secretario general".La resolución del Consejo de Seguridad, patrocinada por EE UU, Reino Unido, China, Francia y la URSS, adoptada por unanimidad el 20 de julio, pide a Irán e Irak que cooperen con el secretario general para lograr un acuerdo que permita el fin de la guerra. Jorasani admitió que Pérez de Cuéllar tenía un papel muy útil que jugar.

El embajador dijo que había pedido al secretario general que no hiciese público el contenido de la respuesta de su país, firmada por el ministro de Asuntos Exteriores, Ali Akbar Velayati, hasta que no se celebren nuevas reuniones entre Pérez de Cuéllar y el representante diplomático iraní en los próximos días.

Presión de EE UU

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Esta primera reacción iraní se produce después de que los miembros del Consejo de Seguridad hayan mantenido reuniones a puerta cerrada para estudiar las próximas medidas a tomar. EE UU ha ejercido en los últimos días, según fuentes diplomáticas, una fuerta presión para que la ONU pase al estudio de las sanciones contra los países que no aprueben la resolución.

Pese a los intentos mediadores de la ONU, ayer prosiguieron los combates en los distintos frentes de la guerra del Golfo, según los partes militares de ambos países. Irak ha reanudado los bombardeos contra objetivos económicos iraníes, mientras que Irán asegura haber avanzado en el frente sur, cerca de Basora, y en zonas fronterizas del centro y norte.

En otro frente, los guardacostas de los Emiratos Árabes Unidos rastrearon ayer, para descubrir minas, la zona comprendida entre los puertos de Jor Fakkan y Fujaira, en el mar de Omán.

Los cuatro dragaminas del Reino Unido que en los próximos días llegarán a la región para desactivar minas limitarán su acción a una zona donde puedan estar protegidos por sus unidades militares. Francia también ha anunciado que enviará dos dragaminas al Golfo.

Esta movilización internacional en favor de la seguridad de la navegación en las aguas por las que circula la mayor parte del petróleo mundial amenazan con modificar las condiciones de tráfico en la zona. La compañía aseguradora británica Lloyd's ha decidido instaurar, por primera vez, una prima por riesgo de guerra para los barcos que atraviesen las aguas del mar de Omán, en la entrada al golfo Pérsico. Esta prima será del 0,125 % sobre el total del valor asegurado. La medida ha sido adoptada como consecuencia de los daños sufridos el pasado lunes por el petrolero norteamericano con bandera panameña Texaco Caribbean, que chocó con una mina fuera de las aguas del Golfo.

El segundo convoy de la Marina norteamericana que da escolta a tres petroleros kuwaitíes ha conseguido, de momento, superar el peligro de las minas, y el martes por la noche llegó al puerto kuwaití de Mina Al Ahmadi.

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