Un juez de EE UU rechaza la prueba del SIDA por ser confidencial

El juicio que se sigue en un tribunal militar norteamericano contra el soldado Adrian Morris, de 27 años, acusado de haber mantenido relaciones sexuales con tres soldados -dos mujeres y un hombre- después de que se le había notificado que era portador del virus del SIDA, muy posiblemente no podrá llevarse a cabo, tras la decisión tomada por el juez militar de Fort Huachuca (EE UU), el coronel Raymond Dean Cole, de no aceptar los resultados de los análisis del SIDA como prueba en el juicio, por considerarlos confidenciales.

Durante el mes de abril de 1986 el soldado Adrian Morris, po...

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El juicio que se sigue en un tribunal militar norteamericano contra el soldado Adrian Morris, de 27 años, acusado de haber mantenido relaciones sexuales con tres soldados -dos mujeres y un hombre- después de que se le había notificado que era portador del virus del SIDA, muy posiblemente no podrá llevarse a cabo, tras la decisión tomada por el juez militar de Fort Huachuca (EE UU), el coronel Raymond Dean Cole, de no aceptar los resultados de los análisis del SIDA como prueba en el juicio, por considerarlos confidenciales.

Durante el mes de abril de 1986 el soldado Adrian Morris, poco después de ser trasladado a Fort Huachuca, fue sometido al análisis del SIDA y la prueba dio positivo, aunque no se le notificó hasta julio de ese mismo año.

Morris, sin embargo, a pesar de conocer que era portador del virus, mantuvo relaciones sexuales sin usar preservativo con dos mujeres y un hombre, todos ellos soldados. Una de las mujeres es su novia y ha dado a luz a un niño completamente normal. En marzo de este año, el Ejército norteamericano acusó a Morris de sodomía y de dos cargos de agresión.

El Ejército norteamericano ha comunicado que los tres soldados que mantuvieron relación con Morris han sido sometidos a la prueba del SIDA y que todos ellos han dado negativo, es decir, no se les ha encontrado anticuerpos del virus en los análisis.

Por su parte, el fiscal que lleva el caso ha anunciado que piensa apelar contra la decisión del tribunal militar de no aceptar la prueba del SIDA y pedir que se revise el caso en Washington. La razón por la que quiere que se traslade la vista a la Administración federal norteamericana se debe a que el fiscal considera que la prueba del resultado del análisis es evidente y definitiva.

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