Ramos vuelve a la vida de torero

José Luis Ramos, que perdió media vida en Las Ventas, consecuencia de una cornada gravísima en la feria de San Isidro, recuperé ayer en Éibar su vida de torero. Si sorprendente ha sido la rapidez de su recuperación, más lo fue ayer su toreo, lógico y de calidad.El toreo lógico de Ramos se impuso cuando en el segundo novillo hizo aparecer la armonía en los ayudados, con calidad en los pases de pecho, con sentimiento en los adornos y recortes, precisos y elegantes. Y al desenvolverse entre los cabezazos del quinto, sin perderle la cara, sin perder un paso, porque siempre se impuso al manso su to...

José Luis Ramos, que perdió media vida en Las Ventas, consecuencia de una cornada gravísima en la feria de San Isidro, recuperé ayer en Éibar su vida de torero. Si sorprendente ha sido la rapidez de su recuperación, más lo fue ayer su toreo, lógico y de calidad.El toreo lógico de Ramos se impuso cuando en el segundo novillo hizo aparecer la armonía en los ayudados, con calidad en los pases de pecho, con sentimiento en los adornos y recortes, precisos y elegantes. Y al desenvolverse entre los cabezazos del quinto, sin perderle la cara, sin perder un paso, porque siempre se impuso al manso su toreo.

Rui Bento está en el buen camino y consigue torear, con temple, como ayer lo logró, sobre todo al natural.

Aparicio se mantiene en la línea de la prudencia, rompe la caera y se adorna con clase, pero no se compromete con los novillos, pone mucho terreno y mucha muleta por medio, con la facilidad de un Antonio Bienvenida y con la prudencia muy bien disimulada.