Javier Ruibal, en su mejor momento

Tres cantautores bien distintos en San Isidro: distinta experiencia, distintos estilos, distintos resultados. Ana Benegas, la más joven, acompañada de un grupo excelente y con unos arreglos igualmente destacables. Su sonido fue creativo y envolvente, superior a las propias canciones, tendentes a la monotonía.Emilio Cao es uno de los creadores más sensibles e inspirados de la música popular española. Recientemente había dado un cambio sonoro a su trabajo, pasando de la fusión de diversas culturas musicales a una asunción de la electrónica como base instrumental. Sin renunciara expresarse con un...

Tres cantautores bien distintos en San Isidro: distinta experiencia, distintos estilos, distintos resultados. Ana Benegas, la más joven, acompañada de un grupo excelente y con unos arreglos igualmente destacables. Su sonido fue creativo y envolvente, superior a las propias canciones, tendentes a la monotonía.Emilio Cao es uno de los creadores más sensibles e inspirados de la música popular española. Recientemente había dado un cambio sonoro a su trabajo, pasando de la fusión de diversas culturas musicales a una asunción de la electrónica como base instrumental. Sin renunciara expresarse con un lenguaje musical distinto, Emilio Cao ha atemperado su fiebre eléctrica y sus hermosas canciones han recuperado buena parte de la hondura que las caracteriza.

Quien tuvo una noche redonda fue Javier Ruibal, como ya viene siendo habitual en él. Canciones inspiradas, una voz comunicativa, que a veces pierde el contenido de las letras en el fraseo, y una sonoridad brillante, original y fuerte sitúan a Javier Ruibal -que esta a punto de editar su segundo disco- en su mejor momento artístico.