El arquitecto y el aparejador de Ajalvir redactan y dirigen presuntas obras ilegales

La Dirección General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid ha enviado a la Comisión de Depuración Profesional del Colegio de Arquitectos y Aparejadores un informe sobre la actuación del arquitecto y aparejador de Ajalvir, quienes, según la citada dirección general, informaron favorablemente sobre la construcción de 17 naves industriales en suelo rústico, de las que eran al mismo tiempo redactores de los proyectos y directores de las obras. Urbanismo ha instado al alcalde a paralizar las obras, presuntamente ilegales

Fuentes de la Dirección General de Urbanismo de la Comunidad declararo...

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La Dirección General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid ha enviado a la Comisión de Depuración Profesional del Colegio de Arquitectos y Aparejadores un informe sobre la actuación del arquitecto y aparejador de Ajalvir, quienes, según la citada dirección general, informaron favorablemente sobre la construcción de 17 naves industriales en suelo rústico, de las que eran al mismo tiempo redactores de los proyectos y directores de las obras. Urbanismo ha instado al alcalde a paralizar las obras, presuntamente ilegales

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Fuentes de la Dirección General de Urbanismo de la Comunidad declararon que los servicios de inspección urbanística constataron en Ajalvir la existencia de más de 100 naves industriales sobre las que pesan irregularidades más o menos graves, pero que se han centrado en 17 por ser los casos más claros de presunta actuación ilegal.Esas 17 naves, actualmente en diversas fases de construcción y situadas a la entrada del pueblo por la carretera de Torrejón de Ardoz, están en suelo rústico, por lo que ya de entrada su edificación sería ilegal.

En dos de los casos, los inspectores de la dirección general descubrieron que los expedientes estaban falseados, puesto que figuraban como sí se fueran a construir dentro de un polígono, el número 10, cuando en realidad estaban fuera del mismo, en terreno rústico. Esta circustancia es la que permite a la dirección general añadir, a los cargos el de falsedad en documento público.

En los 17 casos, el Ayuntamiento concedió la licencia de obras previo informes favorables emitidos por el arquitecto de Ajalvir, Miguel Juan Martín Ledesma, y el aparejador, Antonio Bazán López, quienes, al mismo tiempo, eran redactores de los proyectos en cuestión y directores de las obras.

Acciones penales

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Fuentes de la Comunidad han anunciado que el Servicio de Inspección Urbanística está preparando el envío de los expedientes abiertos sobre los hechos denunciados a la Fiscalía de la Audiencia Territorial para solicitar el ejercicio de la acción penal ya que en la investigación llevada a cabo se han encontrado indicios de presuntos delitos en la actuación de los técnicos municipales".Este periódico no pudo localizar al arquitecto. El aparejador, Antonio Bazán, afirmó:

"Siempre hemos actuado con el total consentimiento del Ayuntamiento. No es cierto que exista incompatibilidad para emitir informes y al mismo tiempo ser los directores de obras, porque no estamos a sueldo del Ayuntamiento, no somos funcionarios de plantilla, sino que tenemos el carácter de honorífico. Hace ocho o nueve años que trabajamos en Ajalvir como honoríficos. Sería distinto si tuviéramos la plaza en propiedad, aunque, aun así, lo normal es que los ayuntamientos decidan no aplicar la incompatibilidad. Esto es algo que ocurre en la, mayoría de los municipios".

En cuanto al hecho de informar favorablemente la construcción de naves en suelo rústico, Bazán argumentó que "la calificación del suelo no es cosa nuestra. Hable con el secretario o el alcalde". El secretario municipal ratificó que las licencias se dan de acuerdo con los informes de los técnicos, y aludió que existe una discrepancia en Ajalvir, que arranca ya desde hace casi 10 años, entre el Ayuntamiento y las autoridades urbanísticas, sobre las delimitaciones del planeamiento. El alcalde, Rafael Mesonero, no pudo ser localizado, aunque se le dejaron avisos en el Ayuntamiento y en su domicilio.

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