Entrevista:LA CASA BLANCA, EN EL BANQUILLO

Scowcroft: "El presidente Reagan ya no conseguirá recuperarse"

Declaraciones de uno de los tres miembros de la 'comisión Tower'

"El presidente Reagan está herido. Ya no conseguirá recuperarse" del impacto del Irangate, según el teniente general norteamericano Brent Scowcroft, quien, con Edmund Muskie y John Tower, integró la comisión presidencial sobre el escándalo de la venta de armas a Irán y el desvío de fondos a la contra. Scowcroft, de 62 años, que fue asesor militar del ex presidente Richard Nixon y consejero de Seguridad Nacional en la Administración de Gerald Ford, es uno de los más destacados expertos internacionales en materia de armamento. Sobre la última propuesta soviética de desarme nuclear dice que no es...

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"El presidente Reagan está herido. Ya no conseguirá recuperarse" del impacto del Irangate, según el teniente general norteamericano Brent Scowcroft, quien, con Edmund Muskie y John Tower, integró la comisión presidencial sobre el escándalo de la venta de armas a Irán y el desvío de fondos a la contra. Scowcroft, de 62 años, que fue asesor militar del ex presidente Richard Nixon y consejero de Seguridad Nacional en la Administración de Gerald Ford, es uno de los más destacados expertos internacionales en materia de armamento. Sobre la última propuesta soviética de desarme nuclear dice que no es beneficiosa ni para EE UU ni para la Alianza Atlántica.

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Pregunta. ¿Qué se puede esperar de las audiencias públicas que ha iniciado el Congreso norteamericano para esclarecer el escándalo del Irangate?Respuesta. Creo que en general habrá poco nuevo en lo que respecta a la vertiente iraní del escándalo. El centro de la atención estará más bien en el capítulo de los contra, en todo lo que concierne a la operación de recogida y suministro de fondos para los rebeldes nicaragüenses y en las eventuales violaciones de la ley por parte de funcionarios oficiales.

P. ¿Es de prever que el comité conjunto del Senado y de la Cámara de Representantes vaya más allá que la comisión Tower, de la cual usted formó parte?

R. Tal vez pueden ir más lejos en lo que concierne al capítulo del dinero...

P. ¿Se sorprendería mucho si el Congreso extrajera datos de una importancia trascendental?

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R. Bueno, la comisión presidencial hizo poco en apartado de la desviación ilegal de fondos a la contra. De todo modos, me sorprendería si la investigación del Congreso re vela algo de un peso sustancial

P. ¿Y con respecto a presuntas responsabilidades del presidente Reagan?

R. Todo es posible. Nosotros, los miembros de la comisión Tower, no descubrimos nada de las conversaciones que mantuvimos con los funcionarios oficiales que quisieron colaborar. No vimos ningún documento que revelara que el presidente estaba al corriente de la operación. En cualquier caso, siempre será muy difícil demostrar que Reagan tenía conocimiento previo.

P. ¿Cree usted que el presidente Reagan está fatalmente herido con este escándalo?

R. No fatalmente, pero sí cierta mente herido. El presidente ya no conseguirá recuperarse del impacto. Además, las audiencias públicas en el Congreso darán pie a nuevas historias periodísticas y todo eso no va a contribuir...

P. ¿Qué lección saca usted del Irangate?

R. La lección básica, especialmente en lo que concierne al capítulo de la venta de armas a Irán, es que no se puede realizar una política nacional en público y otra opuesta en privado sin arriesgar un daño serio para la Administración y para la nación.

La 'opción supercero'

P. El presidente Reagan insiste en la necesidad de seguir suministrando fondos a los contra, a juzgar por su último discurso, pese a la crisis que atraviesa el movimiento rebelde nicaragüense.

R. Estoy a favor de esa política. Creo que debemos apoyar a los contra. Aunque ello no es suficiente para conseguir los objetivos de la Administración de Reagan.

P. ¿Qué opina de la denominada opción supercero, la última oferta de Gorbachov de eliminar las fuerzas nucleares de medio y corto alcance en Europa?

R. Creo que es muy inteligente de su parte, pero la propuesta no es de interés ni para EE UU ni para los países aliados de la OTAN. La Alianza Atlántica ha compensado el desequilibrio de fuerzas convencionales a favor de los soviéticos con la amenaza que representan los misiles nucleares, otorgando así credibilidad a la disuasión nuclear. Pienso que modificar esta política sin medidas compensatorias es una equivocación.

P. De todos modos, ¿cree que habrá en breve un acuerdo sobre control de armas entre EE UU y la URSS?

R. Sí, tanto sobre fuerzas nucleares intermedias como sobre misiles de corto alcance.

P. ¿Y será beneficioso para los europeos?

R. Creo que no.

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