Las 'ciudades del Norte'

Hassan II, en sus intervenciones públicas de los últimos años, ha hecho siempre alusión al tema del Sáhara, pero en muy pocas ocasiones, sin contar los foros internacionales, se ha referido a la cuestión de Ceuta y Melilla.El 13 de agosto de 1984, Marruecos firmó con Libia el ya roto Tratado de Uxda, por el cual los dos países se comprometían a defender al otro en caso de invasión o agresión. En el documento no había referencia alguna a Ceuta y Melilla, pero, con motivo de la convocatoria del referéndum para ratificar la unión de los Estados, Hassan II, en una intervención televisada afirmó: "...

Hassan II, en sus intervenciones públicas de los últimos años, ha hecho siempre alusión al tema del Sáhara, pero en muy pocas ocasiones, sin contar los foros internacionales, se ha referido a la cuestión de Ceuta y Melilla.El 13 de agosto de 1984, Marruecos firmó con Libia el ya roto Tratado de Uxda, por el cual los dos países se comprometían a defender al otro en caso de invasión o agresión. En el documento no había referencia alguna a Ceuta y Melilla, pero, con motivo de la convocatoria del referéndum para ratificar la unión de los Estados, Hassan II, en una intervención televisada afirmó: "El Todopoderoso ha querido que vuestro servidor, hijo y discípulo del llorado Mohamed V, realice la recuperación de los territorios ocupados y no olvida en absoluto nuestras ciudades del Norte". Seis meses más tarde, el monarca alauí hizo unas declaraciones al programa de TVE Informe semanal en las que reivindicaba las plazas de Ceuta y Melilla.

Pocos días después de la celebración del 25º aniversario de su ascensión al trono, en marzo de 1986, Hassan II declaró en una conferencia de prensa que la situación de Ceuta y Melilla era anacrónica y que había mantenido con el rey Juan Carlos un diálogo "en la serenidad" sobre el futuro de las plazas españolas.

El pasado 21 de enero, encargó al ministro español del Interior, José Barrionuevo, que visitaba oficialmente Marruecos, que transmitiera a las autoridades españolas una propuesta formal para iniciar las negociaciones sobre la retrocesión de Ceuta y Melilla, en las que se deberían tener muy en cuenta "los derechos imprescriptibles de Marruecos y los intereses vitales de España en la región".