Selectividad

Desde hace unos días van apareciendo algunas cartas de estudiantes e incluso artículos que parece que quieren desprestigiar la huelga y movilizaciones de los estudiantes de enseñanza media, a las que también nos hemos unido los universitarios (al menos los de mi facultad).En la actualidad no se lucha contra una ley que pueda resultar ambigua, sino contra hechos concretos que nunca han agradado a los estudiantes; a saber: 1. El incremento de las tasas; 2. La selectividad, y 3. La no aceptación de la primera opción de facultad.

1. De...

Desde hace unos días van apareciendo algunas cartas de estudiantes e incluso artículos que parece que quieren desprestigiar la huelga y movilizaciones de los estudiantes de enseñanza media, a las que también nos hemos unido los universitarios (al menos los de mi facultad).En la actualidad no se lucha contra una ley que pueda resultar ambigua, sino contra hechos concretos que nunca han agradado a los estudiantes; a saber: 1. El incremento de las tasas; 2. La selectividad, y 3. La no aceptación de la primera opción de facultad.

1. Desde que llevo estudiando en la Universidad, cada año se han incrementado las tasas, mientras que las becas han seguido igual. Cuando se trata de dinero para educación parece que nunca hay, mientras que si es para armamento no parece importar la cuantía.

2. Es cierto que la Universidad está masificada y que hace falta una selectividad, pero no sólo de estudiantes, sino también de profesores. La verdadera selectividad debería consistir en la mejora de la educación a todos los niveles y una mayor exigencia académica, pero tanto para alumnos como para los que imparten clase; pues en bastantes ocasiones, a pesar de que puede que dominen su materia, no saben transmitir sus conocimientos. Si un estudiante supera todos los escollos de una buena y completa educación (que no tiene por qué ser cara), cuando apruebe COU ya se habrá producido la selectividad por el camino y no harán falta más filtros.

3. Lo menos que se le puede conceder a un alumno que va a ingresar en una universidad, donde probablemente no le enseñen mucho, es que lo poco que le enseñen corresponda a lo que desea o cree estar preparado para estudiar. El mercado laboral ya ejercerá su presión a su debido momento haciéndole cambiar de opción como para que encima lo tenga que hacer antes de tiempo. Se trata del derecho a la educación para todos los ciudadanos y no sólo para los que se lo pueden permitir o estudian cosas poco usuales.

Tal vez las movilizaciones no vuelvan en el futuro si se realizan cambios sustanciales en todos los niveles educacionales. Veremos el resultado que dan leyes como la de Reforma Universitaria (LRU) o la implantación de nuevos bachilleratos (¿es verdad que se va a suprimir la formación profesional?).- Estudiante de quinto curso de Sociología.