El INH se convertirá en empresa y cotizará una parte de sus acciones en la bolsa

El Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH), una entidad de derecho público que engloba a las empresas estatales del sector de petróleo, gas y petroquímica, se convertirá previsiblemente en una sociedad, acudirá a los mercados de capitales y una parte de sus acciones serán vendida al público a través de la bolsa, según anticipó ayer en el Congreso de los Diputados el ministro de Industria y Energía, Luis Carlos Croissier. Por otro lado, Industria no tiene previsto aumentar el parque de generación eléctrica hasta 1993 y no modificará, en consecuencia, la moratoria nuclear, vigente hasta 1988....

El Instituto Nacional de Hidrocarburos (INH), una entidad de derecho público que engloba a las empresas estatales del sector de petróleo, gas y petroquímica, se convertirá previsiblemente en una sociedad, acudirá a los mercados de capitales y una parte de sus acciones serán vendida al público a través de la bolsa, según anticipó ayer en el Congreso de los Diputados el ministro de Industria y Energía, Luis Carlos Croissier. Por otro lado, Industria no tiene previsto aumentar el parque de generación eléctrica hasta 1993 y no modificará, en consecuencia, la moratoria nuclear, vigente hasta 1988.

La eventualidad de privatizar parcialmente el INH, que nunca llegará a ser superior al 50% del capital, fue anunciada ayer como una sorpresa por el ministro de Industria, que a petición propia compareció ante la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados. Sin ofrecer grandes detalles, Croissier desveló el estudio por su ministerio de la probable conversión de este holding público en una empresa, cuyo carácter no especificó, pero que tendría que ser una sociedad anónima, con el fin de: vender una parte de sus acciones en la bolsa.Fuentes solventes señalaron que en estos momentos se estudian los aspectos jurídicos de la operación, que supondrá además el futuro cambio de nombre del INH, el reforzamiento ,de su imagen comercial y la integración vertical, así como financiera e industrial, de las cinco empresas que componen el grupo. Estas empresas son: Hispanoil, de prospección petrolífera; EMP, de refino y propietaria a su vez de la petroquímica Alcudia; Butano SA, comercializadora de gases licuados del petróleo; Enagas, de gas natural; y Campsa, de distribución de productos petrolíferos, en la que el grupo público controla directa e indirectamente casi el 60% del capital. Asimismo, el INH tiene una participación minoritaria de un tercio en Petronor, una refinería situada en Vizcaya de la que son accionistas Petróleos Mexicanos (Pemex) e intereses financieros vascos.

Creado en 1981, al amparo del artículo 6 de la ley General Presupuestaria, el INH tiene en conjunto una plantilla de 21.000 trabajadores, si bien su tamaño es todavía relativamente modesto en relación a las empresas petroleras multinacionales.

Política industrial

En su intervención ante la, Comisión de Industria, Luis Carlos Croissier también anunció algunas significativas modificaciones en la política industrial y energética que seguirá su departamento en relación a la primera legislatura socialista. Una de ellas es el mantenimiento de las líneas general del PEN de 1983 hasta el horizonte originalmente pensado (1992-1993), en contra de las últimas ideas que circulaban en el citado ministerio de anticipar este cambio al año en curso. En concreto, cualquier decisión sobre la moratoria nuclear, que ha paralizado la construcción de cinco grupos nucleares, no se adoptará hasta 1988, fecha ofrecida ahora como límite para la revisión del PEN de 1983. Igualmente, Croissier señaló que las tarifas eléctricas no estarán vinculadas en sus actualizaciones al índice de precios al consumo (IPC) sino a los costes específicos de generación eléctrica. Se mantendrá asimismo el proceso de saneamiento del sector eléctrico y se buscará, en todo caso, una mayor integración de las políticas industrial y energética "con objeto de aumentar la eficiencia y la competitividad del sistema productivo".

En el frente industrial, el titular de Industria y Energía señaló que 1986 ha marcado, debido a la integración en la CE, "una nueva fase" en la política industrial, caracterizada por los cambios institucionales y las restricciones que los mismos supondrán en los mecanismos de ayuda oficial a los distintos sectores y empresas industriales. Como objetivo básico, Croissier señaló la sustitución de la política de reconversión por otra de "ajuste permanente", que describió como de intensificación de aquellos procesos concretos de reconversión aún no culminados y una nueva estrategia de reordenación industrial en los sectores que lo necesiten. Descartó, en cualquier caso, apoyos financieros masivos a las empresas en razón a la reducción de posibilidades de ayuda que ha supuesto la integración española en el marco comunitario.

El titular de Industria hizo también un balance muy exhaustivo sobre los logros que, en su opinión, ha supuesto la política de reconversión, de la que dijo que ha requerido recursos, públicos directos o indirectos del orden de 1,1 billones de pesetas. Las inversiones comprometidas en el horizonte de 1988 han superado el medio billón y la reducción de plantillas ent los nueve sectores afectados por la reconversión superará las 66.000 personas.