La Guardia Civil agradeció al centro sanitario de Mondragón el trato dado a Mateu

La Guardia Civil mostró su agradecimiento al centro asistencial de Mondragón (Guipúzcoa) por el trato que recibió el teniente de los Grupos Antiterroristas Rurales (GAR) Ignacio Mateu Istúriz el pasado sábado, cuando fue tratado de urgencia de las gravísimas heridas sufridas al hacer explosión un artefacto en Aretxabaleta, heridas que causaron su muerte.Mandos y compañeros del teniente de los GAR mostraron su agradecimiento tanto en el momento en que sucedieron los hechos como tras tener conocimiento de la carta de un miembro de la familia Mateu en la que se insinuaba que se había desatend...

La Guardia Civil mostró su agradecimiento al centro asistencial de Mondragón (Guipúzcoa) por el trato que recibió el teniente de los Grupos Antiterroristas Rurales (GAR) Ignacio Mateu Istúriz el pasado sábado, cuando fue tratado de urgencia de las gravísimas heridas sufridas al hacer explosión un artefacto en Aretxabaleta, heridas que causaron su muerte.Mandos y compañeros del teniente de los GAR mostraron su agradecimiento tanto en el momento en que sucedieron los hechos como tras tener conocimiento de la carta de un miembro de la familia Mateu en la que se insinuaba que se había desatendido médicamente a Ignacio. La dirección del centro hospitalario salió al paso de estas acusaciones indicando en una nota que el trato dado a Ignacio Mateu fue en todo momento impecable, "utilizando todos los recursos humanos y tecnológicos que precisaron los heridos, de los que uno falleció en breve plazo y el segundo fue debidamente derivado al hospital de Vitoria, dada su gravedad patológica".

En la nota se indica que los heridos fueron tratados por el equipo de urgencia al completo, "junto con los facultativos especialistas en traumatología, cirugía general, anestesia y reanimación" y concreta que al teniente Mateu se le realizaron tres transfusiones antes de su traslado a Vitoria. Para la dirección del hospital las acusaciones que realiza el hermano del citado teniente sólo pueden deberse al estado emocional, pero no se puede justificar cuando éste hace referencia a que su hermano fue desatendido".

El defensor del pueblo, Joaquín Ruiz-Giménez, tras ponerse en contacto con José Francisco Mateu, autor de la carta en la que culpaba al hospital, se dirigió a la Fiscalía del Estado con el fin de que se iniciaran diligencias judiciales. La apelación al fiscal se realizó por ser el hospital, según la carta, de "carácter privado". El centro, según la dirección, "no es privado, sino una fundación pública promovida por los municipios guipuzcoanos del alto Deva", que se reserva posibles acciones legales.