El milagro de Chiquinquirá

Cuenta la historia que el 26 de diciembre de 1586 la india Isabel vio salir un gran resplandor de un abandonado y desteñido cuadro de la Virgen. La pintura, que originalmente estaba en un altar de Chiquinquirá, se encontraba erguida en el suelo con unos colores muy vivos y alegres, y la luz que despedía iluminaba todo el templo", según relatan las crónicas de la época. "Los santos gloriosos san Andrés y san Antonio también estaban muy mejorados en facciones", agrega la crónica.El fenómeno se repitió el 30 de julio de 1588 y el 6 de enero de 1589, de acuerdo a las pruebas recogidas en el proces...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Cuenta la historia que el 26 de diciembre de 1586 la india Isabel vio salir un gran resplandor de un abandonado y desteñido cuadro de la Virgen. La pintura, que originalmente estaba en un altar de Chiquinquirá, se encontraba erguida en el suelo con unos colores muy vivos y alegres, y la luz que despedía iluminaba todo el templo", según relatan las crónicas de la época. "Los santos gloriosos san Andrés y san Antonio también estaban muy mejorados en facciones", agrega la crónica.El fenómeno se repitió el 30 de julio de 1588 y el 6 de enero de 1589, de acuerdo a las pruebas recogidas en el proceso abierto por la Iglesia para determinar la veracidad del testimonio. El análisis concluyó, el 21 de febrero de 1589, que el resplandor fue un milagro.

Más información

Pese a ser centro religioso de Colombia, ya que la Virgen de Chiquinquirá es patrona nacional, este pueblo, a 100 kilómetros de Bogotá, ha permanecido hasta ahora olvidado por el Gobierno.

La llegada de Juan Pablo II "ha servido para adelantar 50 años". "Se han pavimentado calles que eran sólo polvo cuando hacía sol, y barro cuando llovía", explica un habitante de la localidad.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En