La policía cree que pueden ser 10 los agentes implicados en un servcio de 'protecciones' ilegales

Fuentes no oficiales de la policía valenciana créen que puede ampliarse hasta "ocho o diez" el número de policías nacionales implicados en un servicio ilegal de protección sobre una decena de pubs y bares situados en las cercanías de la calle de Juan Llorens, de Valencia. La Jefatura Superior de Policía de Valencia, mientras tanto, guarda un silencio casi absoluto sobre las investigaciones que desde hace unos días se siguen para determinar el grado de participación de los agentes acusados. Los propietarios de estos establecimientos, algunos de ellos contra su voluntad, pagaban un...

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Fuentes no oficiales de la policía valenciana créen que puede ampliarse hasta "ocho o diez" el número de policías nacionales implicados en un servicio ilegal de protección sobre una decena de pubs y bares situados en las cercanías de la calle de Juan Llorens, de Valencia. La Jefatura Superior de Policía de Valencia, mientras tanto, guarda un silencio casi absoluto sobre las investigaciones que desde hace unos días se siguen para determinar el grado de participación de los agentes acusados. Los propietarios de estos establecimientos, algunos de ellos contra su voluntad, pagaban una cuota de 5.000 pesetas a la semana por estas vigilancias.Tras la información publicada en su edición de ayer por este periódico, el asunto fue tratado en la reunión que diariamiente mantienen el jefe superior de Policía de Valencia con los de las distintas brigadas. De esta reunión, y a través de fuentes oficiales, sólo ha trascendido "el unánime sentimiento de indignación" por la actuación de estos policías y el compromiso de "actuar implacablemente".

Las mismas fuentes han anunciado la apertura de un expediente administrativo contra los policías implicados, que, no obstante, seguirán en activo al menos hasta que se completen las averiguaciones. Alguno de ellos se verá obligado, como medida preventiva, a cambiar de destino, pero no prestarán declaración por el momento.

Pese al silencio oficial, ha podido saberse que, tras la discreta vigilancia a que fueron sometidos los policías mientras patrullaban la zona sometida a protección durante la pasada semana, se está procediendo desde ayer a interrogar a los propietarios de los bares y pubs afectados por estos hechos.

Por otra parte, a partir de la difusión de esta información ha podido detectarse un cierto malestar entre algunos sectores de la policía uniformada, que fuentes policiales oficiales atribuían a "un sentimiento de solidaridad mal entendida".

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