Jena sustituyó a López Cobos en La Pasión de Bach

La Pasión según san Mateo

Juan Sebastián Bach. Coro y Orquesta Nacionales.

Escolanía del Recuerdo. Directores corales: Savas Calvillo, Tomás Cabrera y César Sánchez. Solistas: H. Donath, soprano; A. Gjevang, soprano; Horst Laubenthal, tenor; R. C. Crump, tenor; D. Lawrence, barítono; V. von Halem, bajo; H. Torrent y M. A. Tallante, organistas. Director: Gúnter Jena. Teatro Real, 14, 15 y 16 de marzo.

Volvió a los cielos de la Orquesta Nacional de España lo que, durante años, fue hábito instalado por Frühbeck de Burgos: la interpretación de...

La Pasión según san Mateo

Juan Sebastián Bach. Coro y Orquesta Nacionales.

Escolanía del Recuerdo. Directores corales: Savas Calvillo, Tomás Cabrera y César Sánchez. Solistas: H. Donath, soprano; A. Gjevang, soprano; Horst Laubenthal, tenor; R. C. Crump, tenor; D. Lawrence, barítono; V. von Halem, bajo; H. Torrent y M. A. Tallante, organistas. Director: Gúnter Jena. Teatro Real, 14, 15 y 16 de marzo.

Volvió a los cielos de la Orquesta Nacional de España lo que, durante años, fue hábito instalado por Frühbeck de Burgos: la interpretación de La Pasión según san Mateo, de Juan Sebastián Bach, en las fechas que preludian la Semana Santa. Anunciado para dirigirla el maestro titular, Jesús López Cobos, debió ser sustituido -por causas de enfermedad de su mujer- por el alemán Günter Jena (Leipzig, 1933), que fuera asistente de Karl Richter, de cuyos criterios interpretativos participa.

La obra se escuchó con comodidad, pues Jena la domina absolutamente, y esta vez el Coro Nacional lució una preparación segura y bien orientada. Como el cuadro de solistas, en su mayoría, era de importancia, los resultados merecieron los aplausos del público. Helen Donath (Texas, 1940) es artista de precisos medios y depurado estilo, y la mezzo noruega Anne Gjevan posee una voz de hermoso timbre.

En cuanto al tenor Horst Laubenthal (Eisfeld, 1938), tiene muy bien delineada la parte de Evangelista -quizá lo más genial de la obra-, tanto en sus puros valores musicales, como en los de su rica dramaticidad, con lo que quedó por encima del tenor de las arias, el británico Rogers Covey-Crump, de gran calidad oratorista.

Bellísima la materia y conmovedor el fraseo del barítono californiano Douglas Lawrence, que otorgó expresividad y aureola a la parte de Jesús, y de gran eficacia, en sus diferentes papeles, el bajo berlinés Victor von Halem.

Todos los recursos puestos en juego -solistas del continuo-, coro de niños (Escolanía de Nuestra Señora del Recuerdo) y las dos formaciones titulares convergieron en un trabajo de estimable y hasta interesante profesionalidad.