Las cuentas nacionales, del ábaco al rayo láser

El último avance de la Contabilidad Nacional, impreso con rayos laser, muestra una evolución de la economía mejor de lo que habían estimado hasta ahora la mayoría de los analistas, tanto públicos como privados. Hace un año, cuando el Instituto Nacional de Estadística (INE) realizó el mismo estudio sobre el balance de 1984, ocurrió lo contrario.También ha sido muy distinto el comportamiento de los altos cargos de la. Administración que pueden impedir o autorizar la publicación del avance de la Contabilidad Nacional, según fuentes informadas.

La primicia de que la economía española creció...

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El último avance de la Contabilidad Nacional, impreso con rayos laser, muestra una evolución de la economía mejor de lo que habían estimado hasta ahora la mayoría de los analistas, tanto públicos como privados. Hace un año, cuando el Instituto Nacional de Estadística (INE) realizó el mismo estudio sobre el balance de 1984, ocurrió lo contrario.También ha sido muy distinto el comportamiento de los altos cargos de la. Administración que pueden impedir o autorizar la publicación del avance de la Contabilidad Nacional, según fuentes informadas.

La primicia de que la economía española creció el 2,1 % en 1985 fue dada a conocer por el INE en la noche del pasado viernes, apenas un día después de que terminaron su trabajo los funcionarios encargados de elaborar las cuentas nacionales.

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Con el fin de semana por medio, los cuadros y la información que ilustran todos los años el avance estaban impresos a primeras horas de ayer lunes, gracias a un moderno sistema de impresión por rayos láser.

A diferencia de esta actitud, el avance correspondiente a 1984 fue publicado por dicho instituto varias semanas después de que los autores del trabajo habían dado por concluidas sus estimaciones.

Ocurrió que, al comprobar que las cifras eran más bajas de lo esperado, los responsables del INE -tanto en el Ministerio de Economía y Hacienda como en el propio instituto- ordenaron a los funcionarios que las sometieran a revisión, reuniéndose con expertos del Banco de España, cuyas estimaciones sobre el año 1984 eran por entonces más favorables.

El INE se resiste

Tras cumplir estas instrucciones, los funcionarios no modificaron su primer trabajo, que había sido revelado por este periódico y que el INE publicó ocho días después en sus mismos términos.

Según las cifras oficiales del INE, el PIB había crecido el 2%, con descenso del 1 % en el consumo privado y del 3,5% en la inversión. Volvía así a repetirse una caída de la inversión, pese a que los excedentes empresariales habían crecido de nuevo, en esta ocasión un 22%, y el ahorro alcanzaba una tasa próxima al 30%.

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