El Parlamento Europeo pide separar las declaraciones fiscales de los cónyuges

El Parlamento Europeo, reunido en sesión plenaria en Luxemburgo, pidió ayer que la CEE pusiera en pie una directiva (o ley comunitaria) para que se separen las declaraciones fiscales sobre salarios e ingresos de los cónyuges, para evitar, junto con otras medidas, discriminaciones fiscales contra las mujeres que, en la práctica, pueden convertirse en una incitación a no tener actividades profesionales.

La eurocámara pidió que el régimen de impuestos sobre ingresos y salarios se base "sobre un enfoque individual de cada contribuyente", para así "evitar toda discriminación, directa o indir...

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El Parlamento Europeo, reunido en sesión plenaria en Luxemburgo, pidió ayer que la CEE pusiera en pie una directiva (o ley comunitaria) para que se separen las declaraciones fiscales sobre salarios e ingresos de los cónyuges, para evitar, junto con otras medidas, discriminaciones fiscales contra las mujeres que, en la práctica, pueden convertirse en una incitación a no tener actividades profesionales.

La eurocámara pidió que el régimen de impuestos sobre ingresos y salarios se base "sobre un enfoque individual de cada contribuyente", para así "evitar toda discriminación, directa o indirecta, contra la mujer, en razón del sexo, el estado civil o la situación familiar". La resolución del Parlamento fue defendida por la eurodiputada conservadora británica Shelagh Roberts, en nombre de la comisión de los derechos de la mujer, y aprobada a mano alzada.Se pide que, por medio de esta directiva, los Estados de la Comunidad Europea se abstengan en sus regímenes de imposición fiscal de toda medida, directa o indirecta, que tenga como resultado motivar a la mujer a renunciar al ejercicio de una actividad profesional. La acumulación de los ingresos familiares -con lo que se pasa a otra escala superior de imposición- lleva a este género de disuasión laboral hacia la mujer.

El Parlamento pidió que las deducciones fiscales derivadas de algunos gastos se apliquen a los ingresos de la persona que ha efectuado dichos gastos, y que si éstos han correspondido a ambos cónyuges, las deducciones se repartan proporcionalmente entre ambos. Solicita también que los gastos de guarderías y ayudas domésticas que conlleve el ejercicio de una actividad profesional se deduzcan del impuesto sobre la renta.

El Parlamento Europeo reconoce también que, en general, el estatuto fiscal de las mujeres casadas es menos favorable que el de las solteras, lo que constituye una disuasión al matrimonio. La eurocámara opina que la fiscalidad debe ser neutra tanto hacia las parejas casadas como hacia el cónyuge que lleva a cabo una actividad remunerada, y que a largo plazo el objetivo debe ser un sistema de imposición fiscal separado.

Los casos más avanzados en la actualidad son los de Italia y los Países Bajos, donde es el individuo la unidad de imposición. En otros países, como en la República Federal de Alemania, hay un sistema de fraccionamiento de los impuestos del marido y la mujer, pero sus efectos son, como en otros casos, acumulativos.

En el debate intervinieron 10 eurodiputadas y dos eurodiputados. "La mujer no debe ser un embellecedor, como en los coches, del hombre", señaló Jessica Larive-Groenen Daal (liberal holandesa). "Es aconsejable que la mujer sea el anexo del hombre", intervino Carole Tonque (laborista británica), "y que no conozca el monto de sus ingresos, si quiere escondérselos, pero que él, como rellena la declaración, conozca los ingresos de su mujer".

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