El Supremo reconoce la pertenencia al Ejército de un cabo republicano

El Tribunal Supremo ha reconocido la pertenencia al Ejército del Aire de Antonio Alemán García, cabo mecánico de aviación militar en 1936, que perteneció a las tropas republicanas, y ha condenado a la Administración a que pase a Alemán a la situación de retirado a efectos de cobrar los haberes pasivos.La Audiencia Nacional denegó la petición de Alemán, porque, segun razonó en la sentencia, éste no había presentado ninguna prueba documental que probara que era miembro del Ejército el 18 de julio de 1936, fecha en que comenzó la guerra civil, a pesar de que tres compañeros de Alemán testific...

El Tribunal Supremo ha reconocido la pertenencia al Ejército del Aire de Antonio Alemán García, cabo mecánico de aviación militar en 1936, que perteneció a las tropas republicanas, y ha condenado a la Administración a que pase a Alemán a la situación de retirado a efectos de cobrar los haberes pasivos.La Audiencia Nacional denegó la petición de Alemán, porque, segun razonó en la sentencia, éste no había presentado ninguna prueba documental que probara que era miembro del Ejército el 18 de julio de 1936, fecha en que comenzó la guerra civil, a pesar de que tres compañeros de Alemán testificaron durante el proceso que éste pertenecía en aquella fecha a la milicia.

El Supremo, que ha revocado la sentencia de la Audiencia Nacional, señala que Alemán fue expulsado del Ejército en 1934 por motivos políticos, y se reintegró al servicio por aplicación de la amnistía de 21 de febrero de 1936, sirviendo durante la guerra en el Ejército republicano. Alemán fue ascendido a brigada por orden del ministro de Marina y Aire de la República, el 18 de noviembre de 1936, lo que indica que con anterioridad era sargento, y para acceder a este empleo se necesitan al menos dos años de servicio como cabo.

El alto tribunal desestima la argumentación de la Audiencia Nacional al precisar que "las lagunas de documentación propias de los azarosos tiempos a que se refiere el hecho, hace que por las peculiares circunstancias en ellos concurrentes no pueda tenerse el mismo rigor crítico en la apreciación de la prueba que el empleado en situaciones normales".

El Supremo agrega que la excepcionalidad de las circunstancias que entonces existían no permite conceder una plena fiabilidad al relato de los hechos que se hace en la sentencia del consejo de guerra celebrado contra Alemán en San Javier después de acabada la guerra, el 21 de septiembre de 1939. En esa sentencia se afirma que Alemán había sido expulsado del Ejército por el capitán Avilés, cuando, en el folio 34 del expediente, figuraba que la expulsión fue dispuesta por el general de la primera división.