El avance implacable de la erosión

Una cuarta parte de España se está desertizando. Aunque no existen unas estadísticas fiables que procedan de estudios rigurosos, ésta es una cifra admitida por todas las organizaciones, incluidas las internacionales como la OCDE.Almería y Granada figuran a la cabeza de la desertización, según los últimos datos recogidos en el informe El Medio Ambiente en España, que será presentado próximamente por la dirección general del Medio Ambiente. Estas provincias tienen erosionado más del 50% del terreno. Con un porcentaje que abarca entre un 30 y un 50 se encuentran 14 provincias y otras 14 re...

Una cuarta parte de España se está desertizando. Aunque no existen unas estadísticas fiables que procedan de estudios rigurosos, ésta es una cifra admitida por todas las organizaciones, incluidas las internacionales como la OCDE.Almería y Granada figuran a la cabeza de la desertización, según los últimos datos recogidos en el informe El Medio Ambiente en España, que será presentado próximamente por la dirección general del Medio Ambiente. Estas provincias tienen erosionado más del 50% del terreno. Con un porcentaje que abarca entre un 30 y un 50 se encuentran 14 provincias y otras 14 registran entre un 20 y un 30%. de erosión.

Las causas de la desertización, del terreno español hay que buscarlas tanto en razones naturales e históricas como en motivos más actuales, producto de la industrialización.

La directora general del Medio Ambiente, Concepción Sáez, dice que no podemos olvidar que la erosión en España está unida a la situación climática y latitudinal que afecta a todo el Mediterráneo. "A las frecuentes avenidas que arrastran tierras y a la sequía estival prolongada en esta zona hay que añadir el abandono histórico de los cultivos".

La deforestación y la pérdida de la cubierta vegetal son otras de las graves amenazas ante las que la Administración debe ponerse en guardia. Concepción Sáez afirma que no se dispone de medios suficientes para evitar la lenta pérdida del suelo, y que habrá que replantearse, de cara al ingreso en la Comunidad Económica Europea, nuevos cultivos o reequilibrio de los mismos con tal de no dejar el suelo desnudo.

Entre las amenazas más modernas y propias -en parte, de las costumbres que ha generado la sociedad industrial- se citan las migraciones rurales, la repoblación salvaje y la utilización de tecnología y utillaje que agrava la erosión. En este punto puede citarse el polémico tema del trazado de terrazas por el Instituto de la Conservación de la Naturaleza (Icona), que ha sido contestado por los grupos ecologistas.

No es banal tampoco citar, entre las más de 80 causas de desertización de la tierra que se deben a la acción humana, el tema de los incendios forestales, que, en España, se han convertido, en una práctica muchas veces provocada.