Tensión en la jerarquía brasileña por la sanción a Leonardo Boff

La sanción impuesta por el Vaticano al teólogo brasileño Leonardo Boff sigue provocando fuertes protestas en Brasil. La decisión del Vaticano de condenar al silencio absoluto "por un tiempo conveniente" a Leonardo Boff -uno de los principales teóricos de la teología de la liberación- ha acentuado aún más las divergencias en la Iglesia brasileña.

Una nota firmada la semana pasada por diez obispos pertenecientes al sector progresista señaló que la sanción aplicada a Boff es "poco evangélica y lesiva de los derechos humanos".

El cardenal de Río de Janeiro, Eugenio Salles,...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La sanción impuesta por el Vaticano al teólogo brasileño Leonardo Boff sigue provocando fuertes protestas en Brasil. La decisión del Vaticano de condenar al silencio absoluto "por un tiempo conveniente" a Leonardo Boff -uno de los principales teóricos de la teología de la liberación- ha acentuado aún más las divergencias en la Iglesia brasileña.

Una nota firmada la semana pasada por diez obispos pertenecientes al sector progresista señaló que la sanción aplicada a Boff es "poco evangélica y lesiva de los derechos humanos".

El cardenal de Río de Janeiro, Eugenio Salles, identificado con el sector más conservador, contestó a la nota diciendo que los que no estén sastisfechos con las decisiones del Vaticano deben de abandonar la Iglesia católica. El mismo nuncio apostólico en Brasil, Carlo Furno, se dirigió en términos enérgicos a los que criticaron la sanción impuesta a Boff.

Más información

El nuncio apostólico llamó personalmente por teléfono a los diez obispos que firmaron la nota para manifestarles su desagrado, pero ninguno de los obispos aceptó relatar cuáles fueron exactamente los términos de la reprimenda.

Uno de los obispos que firmó la nota, Antonio Fragoso, obispo de Crateus, una importante diócesis del Estado de Seará, en la región noreste de Brasil, se limitó a criticar una vez más la sanción. "Fue algo muy duro y poco constructivo", dijo ayer a este corresponsal.

Pese a la manifestación del nuncio y de la dura reacción de los obispos conservadores, las protestas siguen. Ayer mismo, circulaba en Río de Janeiro un manifiesto firmado por los principales intelectuales brasileños protestanto por la decisión del Vaticano. Otros manifiestos organizados por grupos vinculados a la Iglesia, circulan por las principales capitales del país.

Archivado En