El Gobierno propone a las centrales privatizar el trabajo portuario

El Gobierno propone la privatización de los trabajos portuarios y la adecuación de este colectivo a las garantías laborales del resto de los trabajadores. La propuesta, efectuada por el Ministerio de Trabajo a los representantes sindicales, mantendría prácticamente intactos algunos de los privilegios que tradicionalmente han venido siendo privativos de los estibadores portuarios y cabaría con otros. La Intersindical Nacional de Trabajadores Gallegos (INTG) ha mostrado su rechazo a la reforma por entender que la gestión y el trabajo de los puertos debe seguir haciéndose a través de un servicio ...

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El Gobierno propone la privatización de los trabajos portuarios y la adecuación de este colectivo a las garantías laborales del resto de los trabajadores. La propuesta, efectuada por el Ministerio de Trabajo a los representantes sindicales, mantendría prácticamente intactos algunos de los privilegios que tradicionalmente han venido siendo privativos de los estibadores portuarios y cabaría con otros. La Intersindical Nacional de Trabajadores Gallegos (INTG) ha mostrado su rechazo a la reforma por entender que la gestión y el trabajo de los puertos debe seguir haciéndose a través de un servicio público, como es, hasta ahora, la Organización de Trabajos Portuarios (OTP).El documento de reforma de la Organización del Trabajo Portuario (OTP) sometido a consideración de los representantes de las empresas y de los trabajadores mantiene el carácter de servicio público del trabajo de estiba en los puertos españoles, aunque se muestra a favor de suprimir algunos privilegios y mantener la mayoría de ellos.

Carácter cerrado

Según la propuesta, el trabajo portuario sería de carácter cerrado (sólo para un colectivo exclusivo de trabajadores), con garantía salarial (se cobraría hubiera o no trabajo) y la gestión y administración así como la vinculación laboral dependería de una corporación de empresas de estiba. Este último punto ha sido, fundamentalmente, el que ha levantado las iras de los representantes de los trabajadores que quieren seguir manteniendo su vinculación laboral con la Administración o alguna de sus instituciones.

La OTP es en la actualidad un organismo autónomo del Ministerio de Trabajo que tiene a su cargo la administración de los trabajos portuarios. Actúa como una oficina de empleo -otras versiones aseguran que es en realidad una empresa prestamista de mano de obra- que proporciona trabajadores a las empresas estibadoras en los distintos puertos españoles. Las empresas abonan a la OTP por estos servicios y la organización paga a su vez a los trabajadores, de acuerdo con unas tarifas ya fijadas. Al mismo tiempo tiene a su cargo el pago del seguro de desempleo -de especiales características en este colectivo- y la gestión, cobro y pago de la Seguridad Social. `

Acusada en el pasado de .auténtica mafia" -nadie podía entrar en el censo, se vendía el puesto de trabajo, etcétera-, sufrió una primera transformación en octubre de 1980. En aquella ocasión, un real decreto de la Presidencia del Gobierno, publicado en el Boletín Oficial del Estado, reffifinió sus funciones, pero mantuvo el carácter autónomo de este organismo. Salvo en la vinculación laboral, lo cierto es que las propuestas de reforma del Gobierno, existen pocas diferencias con la situación actual.

Se mantienen la mayoría de los privilegios que comparados con otros colectivos de trabajadores no dejan de ser sorprendentes. Se propone la creación de una corporación de empresas, compuesta por las distintas sociedades portuarias, estableciéndose las condiciones para figurar en ese censo. El personal especialista y de confianza se integrará en las empresas, y el resto formará parte de un censo laboral que dependerá de la corporación de empresas.

A medida que las empresas necesiten personal, lo solicitarán a la corporación quien atenderá las solicitudes por rotación. Se establece un salario mínimo que habrá de satisfacer la corporación al personal censado, y pluses de cantidad. Y se suprime el actual sistema de desempleo vigente, igualándolo con el de otros colectivos.

En las propuestas se mantiene la exclusividad de los trabajos. Y así, se garantiza que las tareas portuarias sólo podrán realizarse a través del personal censado. Es decir, que las empresas portuarias habrán de recurrir al censo para realizar cualquier tarea de estiba. Únicamente recurrirán a la oficina de empleo, en caso de que el censo se agote. Si una empresa desaparece, su personal pasa al censo, y por tanto a la corporación. Y en el caso de que también desapareciera la totalidad de las empresas, la autoridad portuaria asumiría sus funciones.

Personal fijo

La obligación de recurrir al censo, se extiende también a la hora de cubrir los puestos de trabajo fijos de las de las empresas. Serán puestos fijos los de personal administrativo y de gestión, maquinistas y encargados y capataces.

El número de trabajadores que componen el censo será fijado anualmente por la autoridad portuaria. Los dos tipos de trabajadores portuarios que se fijan en la propuesta -fijos y del censo- cobrarán un salario mínimo y de cada empresa los pluses que se establezcan. La corporación nutrirá sus fondos de un tanto que habrán de abonar las empresas estibadoras y aportaciones de la Administración.

Las primeras reacciones a la propuesta del Gobierno han partido hasta el momento de la INTG. Para esta central, no se respeta la exclusividad de los trabajos, ni la unidad del colectivo. La INTG mantiene que ha de mantenerse la vinculación laboral con un ente público, por lo que rechaza que se cree una corporación de empresas, medida que califican de "muestra de la política liberal capitalista que lleva a cabo el PSOE".

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