Los ensayos clínicos de la píldora abortiva RU-486 han dado resultados favorables
Investigadores franceses y suecos han hecho públicos los resultados de los ensayos clínicos realizados con un compuesto químico que interrumpe el embarazo cuando éste es de pocas semanas, sin que se hayan observado efectos secundarios. El fármaco, desarrollado en Francia hace dos años y medio, lleva el nombre de RU-486 y actúa oponiéndose a los efectos de la progesterona, una hormona necesaria para el desarrollo del embarazo. Los ensayos clínicos se han realizado hasta el momento en diversos países bajo los auspicios de la Organización Mundial de la Salud y se ha observado un 75% de efectivida...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Investigadores franceses y suecos han hecho públicos los resultados de los ensayos clínicos realizados con un compuesto químico que interrumpe el embarazo cuando éste es de pocas semanas, sin que se hayan observado efectos secundarios. El fármaco, desarrollado en Francia hace dos años y medio, lleva el nombre de RU-486 y actúa oponiéndose a los efectos de la progesterona, una hormona necesaria para el desarrollo del embarazo. Los ensayos clínicos se han realizado hasta el momento en diversos países bajo los auspicios de la Organización Mundial de la Salud y se ha observado un 75% de efectividad.Los investigadores suecos, dirigidos por el catedrático Marc Bygdeman, del Instituto Karolinska, de Estocolmo, han experimentado la asociación del RU-486 con inyecciones de prostaglandina, un compuesto químico utilizado tradicionalmente para aumentar la contractibilidad del útero, pero que en altas dosis presenta efectos secundarios, tales como náuseas, dolores y vómitos. Esta asociación, aunque realizada hasta el momento sobre una muestra limitada de mujeres -33-, ha dado una tasa del 100% de efectividad.
La nueva píldora fin de ciclo está indicada para aquellas mujeres que noten un retraso de la menstruación y, una vez confirmado el embarazo, deseen abortar. No se han observado efectos secundarios en los aspectos metabólico y clínico, y solamente una tendencia a hemorragias prolongadas.