Crítica:MÚSICA CLÁSICA

Gustav Mahler, en su esencia

Permite la música de Mahler, como tantas otras, muy diferentes lecturas, pero siempre que se respete una serie de principios que vienen determinados por la fuerza de la lógica y la natural evolución del discurso antes que por ningún supuesto extramusical.El director francés Jacques Mercier (Metz, 1945), un muy brillante discípulo de Rosenthal, ha demostrado en su interpretación de la cuarta sinfonía de Mahler al frente de la Orquesta Nacional que posee un concepto clarificador, preciosista y refinadamente expresivo. Es general la visión abultada de los pentagramas mahlerianos, cuando lo cierto...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Permite la música de Mahler, como tantas otras, muy diferentes lecturas, pero siempre que se respete una serie de principios que vienen determinados por la fuerza de la lógica y la natural evolución del discurso antes que por ningún supuesto extramusical.El director francés Jacques Mercier (Metz, 1945), un muy brillante discípulo de Rosenthal, ha demostrado en su interpretación de la cuarta sinfonía de Mahler al frente de la Orquesta Nacional que posee un concepto clarificador, preciosista y refinadamente expresivo. Es general la visión abultada de los pentagramas mahlerianos, cuando lo cierto es que el compositor hizo prodigios en la diversificación instrumental y sólo en algunas ocasiones su orquesta suena excesivamente densa y hasta gruesa.

Orquesta Nacional de España

Director. Jacques Mercier. Pianista: Pascal Devoyon. Soprano: Beverly Hoch. Obras de Beethoven y MahIer. Teatro Real. Madrid, 30 de noviembre, 1 y 2 de diciembre.

Ha de pensarse también, con criterio historicista, en la Viena de 1900, cuya música popular suena en combinaciones instrumentales muy reducidas y muy sutiles, que van del trío de cuerda (dos violines y un contrabajo) hasta la mezcla de los arcos con algunos instrumentos de viento y, muchas veces, con la guitarra.

Esta materia sonora sería asumida por Schönberg y sus seguidores como testimonio de un vienismo melancólico y sintetizador. Creo, pues, que Mercier entiende a Maliler desde una aguda y admirable perspectiva, sólo faltaron algunos ensayos para que la realización respondiese al rigor de los planteamientos.

De corto aliento

Parecido concepto aplicó el maestro al concierto en sol de Beethoven; quiero decir que dejó la historia en su sitio e instaló el cuarto concierto pianístico en una vía de salida del clasicismo vienés, pero todavía dentro de él.Con todo y poseer una bella sonoridad y un juego neto, a más de una atractiva expresividad, el pianista Pascal Devoyon (París, 1953) nos ofreció un Beethoven muy corto de aliento. Tampoco sorprendió, a pesar de su bello estilo y de su clára dicción, la soprano Beverly Hoch: ni su voz es grande, ni llama especial atención por su belleza.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En