Segurado supedita la credibilidad del Gobierno al cumplimiento del AES

La credibilidad del Gobierno ante los empresarios depende del cumplimiento de sus compromisos en el Acuerdo Económico y Social (AES) sobre adecuación de la legislación laboral española a la de la CEE, en un plazo de seis meses, y sobre mantenimiento del actual nivel de presión fiscal, afirmó ayer José Antonio Segurado, presidente de la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (CEIM), ante la asamblea de su organización.

Segurado, en un tono moderado y con un lenguaje del más puro estilo kennedyano, criticó a los gobernantes, pero pidió comprensión y apoyo a los mismo...

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La credibilidad del Gobierno ante los empresarios depende del cumplimiento de sus compromisos en el Acuerdo Económico y Social (AES) sobre adecuación de la legislación laboral española a la de la CEE, en un plazo de seis meses, y sobre mantenimiento del actual nivel de presión fiscal, afirmó ayer José Antonio Segurado, presidente de la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (CEIM), ante la asamblea de su organización.

Segurado, en un tono moderado y con un lenguaje del más puro estilo kennedyano, criticó a los gobernantes, pero pidió comprensión y apoyo a los mismos ("hay que afrontar una tarea de gigantes"). Empleando un símil de luces y sombras analizó los problemas de la economía española (desempleo, caída de la inversión y del consumo, crecimiento del gasto de las administraciones públicas, comportamiento de las empresas estatales, etcétera), y aquellos aspectos que han mejorado (exportaciones y cierto control de la inflación).Criticó con rotundidad el proyecto de ley de la Comunidad Autónoma de Madrid sobre el recargo del IRPF y se dolió de las descalificaciones globales e incluso de los insultos personales que habían recibido por este tema. Pero inmediatamente recordó que Comunidad Autónoma y empresarios madrileños, a veces con discrepancias, habían colaborado y se habían potenciado mutuamente (citó la creación conjunta de una sociedad de avales para las pymes). Nuevamente reiteró el mensaje de concordia y colaboración.

Mostró gran preocupación por la seguridad ciudadana (se guardó un minuto de silencio por Manuel Angel Quintana, empresario asesinado recientemente) y puso énfasis en la necesidad de combatir las drogas. Y cuando lo dijo procuró dar sensación de serenidad y comprensión hacia las autoridades ("no vamos a cabalgar el tigre de la inseguridad ciudadana").

"Dejadme soñar"

Segurado dijo que España debe afrontar una serie de problemas de tal magnitud que sobrepasan la tarea del Gobierno y requieren la colaboración y el esfuerzo de todos: integración en la CEE y definición respecto a la OTAN; una gravísima crisis económica con las secuelas del paro y la necesidad de una reindustrialización; y la consolidación de las autonomías con una situación límite en el País Vasco."Es una tarea de gigantes. Es tan compleja y difícil que hace falta el esfuerzo de todos para resolverla. Cuando se tiene un gran poder en votos y diputados, como es el caso de este Gobierno, es cuando hay que ser más generosos". A veces los dirigentes, dijo, "nos mostramos arrogantes e indiferentes" en nuestras acciones y manifestaciones, y no escuchamos a los demás. Tampoco podemos seguir deteriorando las instituciones, añadió. Las nuevas generaciones, a veces, no nos entienden, dijo, y es necesario dar respuesta a sus inquietudes. "Tenemos que darles la seguridad de un puesto de trabajo, de una educación que es la base para poder elegir libremente, y de que sus opiniones van a contar". El presidente de CEIM concluyó: "dejadme soñar", que esto es posible.

Segurado anunció la próxima reincorporación de CEIM a los órganos directivos de CEOE, y defendió la firma del AES como "un acto de responsabilidad colectiva".

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