Un director polaco y un grupo latino montan un 'strip-tease' mental

Strip-tease es el título del espectáculo que presentará, desde el 26 de junio hasta el 8 de julio, en la sala Villarroel, de Barcelona, el grupo de teatro Vol ras. Se trata, según sus intérpretes, de "un strip-tease físico y mental, donde nos despojamos de todo, desde nuestras actitudes hasta los objetos que nos rodean". La obra presenta cuatro elementos que se manifiestan de forma constante a través de los diversos personajes: las imaginaciones, los recuerdos, los sueños y las ilusiones, todo ello aderezado con una cierta dosis de distanciamiento y simbolismo. El autor y director es el polaco...

Strip-tease es el título del espectáculo que presentará, desde el 26 de junio hasta el 8 de julio, en la sala Villarroel, de Barcelona, el grupo de teatro Vol ras. Se trata, según sus intérpretes, de "un strip-tease físico y mental, donde nos despojamos de todo, desde nuestras actitudes hasta los objetos que nos rodean". La obra presenta cuatro elementos que se manifiestan de forma constante a través de los diversos personajes: las imaginaciones, los recuerdos, los sueños y las ilusiones, todo ello aderezado con una cierta dosis de distanciamiento y simbolismo. El autor y director es el polaco Andrej Leparski, afincado en España desde hace 8 años.Vol ras se constituyó como grupo en 1980. Está formado por Joan Faneca, Joan Segalés, Joan Cusó y Miquel de Marchi. Su primera colaboración fue un espectáculo con Hermann Bonnin titulado Lombra d'un copalta damunt l'asfalt. Al año siguiente presentaron El cas de la patata rossa, en el Festival Intemacional de Mimo de Barcelona. En 1982, ofrecieron un espectáculo infantil, El cavallet d'illusions, estrenado en la Fundación Miró. En 1983 estrenan Right (volada), titulado conjuntamente en catalán e inglés. Esta obra ha hecho más de 100 representaciones en toda España, aunque aún no ha sido estrenada en Barcelona.

Vol ras considera que sus espectáculos se mueven dentro de la línea de mimo-clown, aunque Strip-tease presenta, además, "una cierta dosis de experimentación. Como lo hemos estranado ya en Valencia y en Tarragona, sabemos que funciona con el público, más de lo que al principio esperábamos". "En esta obra", explican, "lo que más hemos trabajado es la expresión corporal y una cierta estética del color". Creen que el resultado es la combinación de la aportación de Leparski, desde su visión de polaco, y ellos mismos como latinos.